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4 motivos para consumir fruta y verdura de temporada

4 motivos para consumir fruta y verdura de temporada

Seguro has escuchado sobre el tema de los vegetales de temporada y puede que tengas dudas sobre de qué se trata exactamente: ¿por qué preferir las frutas y verduras de temporada ante otras? ¿es una restricción para tener una alimentación balanceada? ¿ahorraré mucho dinero si solo compro vegetales de temporada?

INTERESANTE

La verdad es que siempre será mejor para tu organismo consumir vegetales frescos. Este es uno de los principales motivos para comprarlos dentro de la temporada; solo así asegurarás la calidad. Segundo, ciertamente hay una relación entre temporada y costo, algo que te explicaremos más adelante.

Sin embargo, en el proceso de deshidratación de las frutas y verduras se conservan muchos más nutrientes que la fruta fresca. ¿Cómo es posible? Pues, la fruta pasa por un proceso de “secado” donde se elimina gran parte del agua para concentrar solo los beneficios de cada una. Por ejemplo: podrías disfrutar de los deliciosos higos secos durante todo el año.

¡Sigue leyendo para aprender todo sobre este tema!

¿Cuáles son las ventajas de comer fruta y verdura de temporada?

Nuestros antepasados sabían cuándo consumir las frutas y verduras frescas. Se preparaban para la temporada de lechuga, de mangos, de aguacate, etc. Entonces, más que tratarse de estaciones: primavera, verano, otoño e invierno; se trata de un período de tiempo donde la fruta y la verdura se cosecha. La ventaja va desde el sabor hasta lo que gastamos.

¿Y cuáles son las temporadas? Todo dependerá de los suelos y los microclimas. Básicamente de los territorios donde son cosechadas. Por ejemplo: en Chile no existe la temporada de mangos y papayas. En el trópico no hay temporadas de frutos rojos y kiwi. Solo conoceremos las temporadas cuando vivamos en un lugar específico. De resto, ¡guiémonos por cómo lucen!

1. Tendrás toda la frescura y los nutrientes

Cuando la fruta o verdura es de temporada asegurarás que está recién cosechada. No hay algo más delicioso que el aroma de un vegetal fresco. Las verduras son más crujientes y las frutas más jugosas. Además de que, al no ser procesadas, conservan todos los nutrientes que tu organismo necesita.

Esto no significa que jamás deberías comprar vegetales fuera de temporada. Pero queremos que siempre tengas lo mejor, así que lo ideal es optar por estas. Además de todas las propiedades, la apariencia será ideal: ¡y bueno, uno come por los ojos! Mucho color, frescura, sabor y textura ideal.

2. El costo será menor

Tu bolsillo te agradecerá si compras solo frutas y verduras de temporada. Sin duda, son mucho más baratas. Aunque recuerda, depende del lugar que habites. Influyen muchos factores: el costo de la cosecha, el traslado y la comercialización. Es por eso que, cuando compras en una tienda de vegetales o mercados populares, será mucho más barato que comprarlos en el supermercado.

3. Podrás conservarlas mejor: mermeladas y congeladas

¿Qué pasa cuando adoras una fruta o verdura y no está en su temporada? ¿Debes esperar a la siguiente? Puede ser, pero existen otras opciones. Unas de esas es preparar mermeladas caseras o congelar. Cada vez son más personas las que dejan de comprar mermelada y productos congelados en el supermercado: lo reemplazan con lo casero.

Existen miles de tutoriales en la red sobre cómo preparar conservas de frutas. Las mermeladas más deliciosas suelen ser las de duraznos, fresa, frambuesa, melocotón… que, ahora que lo mencionamos, piensa en lo rápido que se descomponen estas frutas cuando las compramos. Allí es donde preparar mermeladas sin azúcar refinada puede salvarlas.

Por otra parte, los vegetales también pueden congelarse, sobre todo verduras específicas como las habas y los pimientos. El plátano y el mango congelado también son frutas que resultan perfectas para los smoothies. ¡Solo es cosa de que vayas experimentando!

4. Es ecológico y sustentable

Cuando los vegetales son de temporada es menos probable que sean afectados por fertilizantes, así que también se cuidan los suelos. Además, las frutas y verduras de producción local, las más frescas, reducen las consecuencias de la comercialización que te comentábamos antes: el transporte para su distribución.

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