La Historia de: Joseph Banks Rhine, el padre de la parapsicología
El parapsicológico estadounidense Joseph Banks Rhine nació en 1895. Sus primeros estudios no estaban relacionados con el campo de lo parapsicológico; tras una rápida carrera académica se doctoró en biología y psicología por la Universidad de Chicago en 1925.
Durante tres años se dedicó a la botánica, especializándose en la investigación de la fisiología de las plantas. En 1926 estuvo trabajando en la Universidad de Harvard, donde a través de la psicología tuvo el primer contacto con los fenómenos parapsicológicos, explorándolos junto a su esposa la Dra. Louisa E. Rhine.
En 1927 se incorporó a la Universidad de Duke, en la ciudad de Dirham, en el estado de Carolina del Norte, seguramente motivado por el traslado del prestigioso psicólogo Dr. William Mc. Dougall, a quien había conocido en Harvard, pues nada más llegar al nuevo destino ingresó en su equipo de trabajo multidisciplinario de la cátedra de psicología.
En el mismo año 1927 empezaron las primeras investigaciones de la fenomenología parapsicológica, y por iniciativa del Dr. Mc. Dougall en 1930 se creó oficialmente el primer laboratorio de parapsicología destinado a estudiar los fenómenos aparentemente inexplicables producidos por la mente.
La dirección del laboratorio recayó en el Dr. Joseph B. Rhine, ya que venía estudiando esta disciplina oficiosamente desde los tiempos de Harvard y era considerado el hombre idóneo para progresar en las investigaciones sobre este campo.
Dentro del departamento de psicología el Dr. Rhine tenía por misión demostrar la veracidad y consistencia científica del fenómeno parapsicológico y para ello ideó un sistema de experimentación aplicando el método estadístico matemático a la producción y a la evaluación de este tipo de fenómenos.
Al principio, Rhine investigó, fundamentalmente a través de la Percepción Extra Sensorial, los fenómenos parapsíquicos que tenían lugar entre personas, pero más tarde pasó a interesarse por los fenómenos parafísicos, a los que llegó mediante la psiococinesis; en estos experimentos, las personas actuaban sobre la materia inorgánica, los ejercicios se realizaban con dados; finalmente se interesó por los fenómenos mixtos, en los cuales el hombre actuaba sobre la materia orgánica vida de los vegetales y de los animales.
Como consecuencia del resultado de las investigaciones obtenidas por su grupo de estudio, en 1937 Rhine creó el Journal of Parapsychology (Diario de Parapsicología), que se convirtió en la primera y principal publicación científica del mundo sobre la materia.
Además, creó la Fundación para la Investigación de la Naturaleza del Hombre; reorganizó el laboratorio de parapsicología y lo transformó en el primer Instituto de Parapsicología universitario, del cual surgirían posteriormente los pioneros profesores e investigadores de la parapsicología entendida como ciencia.
Tras largos años de investigaciones del psi y sus consecuencias paranormales, en compañía de su mujer y del Dr. J. Gaither Pratt, Rhine consiguió demostrar a la ciencia que el fenómeno parapsicológico existía realmente y era matemáticamente verificable, abriendo definitivamente de esta forma las puertas de la Universidad a la Parapsicología, pues a partir de entonces este tipo de fenomenología resultaba demostrable mediante el lenguaje universal científico: las matemáticas.
Tras la presentación de múltiples trabajos sobre el estudio de estos fenómenos por el método cuantitativo y de su evidente consistencia estadística, la parapsicología fue finalmente aceptada como ciencia por la American Association for the Advancement of Science (AAAS) en 1969.
Durante más de cincuenta años, el Dr. Rhine estuvo dedicado a la parapsicología y sobre sus investigaciones y resultados escribió varios libros, entre los cuales destacan: “El poder de la mente” (1947), “El Nuevo Mundo de la Mente” (1953) y “Parapsicología” (1957), obra escrita conjuntamente con el Dr. Pratt. J.B. Rhine.
Murió a las 4,30 de la madrugada del 20 de febrero de 1980 en su casa de Dirham, contaba 85 años de edad y era el verdadero artífice de esta nueva y moderna ciencia que hoy ya se estudia en más de 300 universidades del mundo.
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