Durante los últimos años de la Segunda Guerra Mundial, los líderes de los aliados debían reunirse en la ciudad de Teherán para planificar su cooperación en el conflicto, pero los nazis no querían desaprovechar esta oportunidad para matarlos a todos juntos en la Operación Weitsprung…
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En 1943 los líderes del bando de los aliados, Winston Churchill de Reino Unido, Franklin D. Roosevelt de Estados Unidos y Iósif Stalin de la URSS se reunirían en Teherán, Irán, para discutir detalles sobre la mutua cooperación que ejercerían en contra de la Alemania nazi. Por ende, no es de extrañar que el bando enemigo, los nazis, planearan algo para no desaprovechar esta inusual oportunidad de tener a sus máximos enemigos juntos llevando a cabo la Operación Weitsprung (Salto Largo).
Con esta misión los nazis acabarían con sus principales contrincantes, un plan ideado por el jefe de la Gestapo, Ernst Kaltenbrunner, quien había descubierto que la reunión en territorio iraní se llevaría a cabo debido a una falla de comunicación entre los aliados. Como era de esperarse, Adolf Hitler dio su total aprobación al “salto largo”, así que había que ponerse en marcha para aniquilar a los aliados.
El encargado de liderar la Operación Weitsprung sería Otto Skorzeny, y el plan consistía en que varios paracaidistas alemanes descenderían en la capital iraní, mientras que una red de espionaje nazi ofrecería “refugio” para los líderes de los aliados; allí los asesinarían.
Todo estaba fríamente calculado por Skornezy, pero no contaba con que habría espías soviéticos infiltrados quienes pudieron descubrir su ambicioso plan, especialmente porque uno de los agentes nazis reveló parte de la información de la confabulación mientras estaba en estado de ebriedad.
Los agentes soviéticos, liderados por Guevork Vartanián de 19 años, lograron interceptar las comunicaciones de los alemanes y se prepararon para proteger a Churchill, Roosevelt y Stalin.
Debido al alto desempeño que lograron los agentes soviéticos y la inteligencia británica, Skornezy tuvo que abortar la complicada misión nazi para regresar a Berlín antes de que fuesen descubiertos por las autoridades locales.
En cuanto a Vartanián, el agente murió en 2012, pero recibió las más altas condecoraciones por su desenvolvimiento en la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Fría; incluso se reunió en 2007 con la nieta de Churchill.
Lo más curioso de esta anécdota es que sin la ayuda de este agente, y de los servicios de inteligencia británicos, Hitler habría logrado asesinar a Churchill, Winston y Stalin, quienes fueron los que lograron derrotarlo, así que, de haberse logrado ese plan, el mundo sería definitivamente un lugar muy diferente al que conocemos…
Con información de Wikipedia / El Mundo / Imagen: Wikimedia
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Autor:
Omar N. Golding
