Fundador de la escuela de Amberes, el pintor flamenco Quentin Massys, creó en 1514 una de las primeras escenas de género de la historia del arte. ‘El cambista y su mujer’ es considerada la obra de arte más conocida del artista, no solo por la escena de género, sino por el mensaje social y moral que la pintura transmite…
Altamente influenciado por el estilo de los primitivos flamencos, el pintor Quentin Massys trabajó en Amberes para la burguesía del siglo XVI, logrando fundar la escuela pictórica de dicha ciudad.
El cambista y su mujer, también conocida como El prestamista y su mujer, representa no solo una de las primeras escenas de género de la época, pues la inscripción sobre el marco tomada del Levítico transmite un mensaje que va más allá de lo visible en la pintura: “Que la balanza sea justa y los pesos iguales”.
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La escena de género…
El óleo se encuentra ambientado en el taller u oficina del cambista. Al fondo se perciben unas estanterías con diversos objetos cotidianos que hacen alusión y complementan la escena de ambos personajes en un ambiente de trabajo.
La precisión y cuidado que puso el pintor en los detalles, hace notar el estilo gótico y renacentista que esta obra flamenca tiene.
La minuciosidad de la pintura que caracteriza a los pintores flamencos se puede apreciar a detalle en el primer plano de la obra, donde se presentan diversos objetos de valor puestos sobre una mesa (libro, monedas, balanza).
En la parte baja de la pintura y casi en el centro se encuentra un espejo convexo, el cual refleja a un hombre leyendo al lado de una ventana que da vista a la calle. Este es un recurso muy representativo de la pintura flamenca, el ejemplo más icónico se puede observar en la obra de Jan van Eyck: El matrimonio Arnolfini.
El cambista y su mujer
El matrimonio se encuentra de medio cuerpo detrás de una mesa y cortados por ambos lados del cuadro. El cambista cuenta y pesa oro acompañado de su esposa, quien hojea distraída un libro de devoción que tiene entre sus manos. Se podría decir que esta es una escena de género que representa las costumbres de la época.
No obstante, la mujer se encuentra más concentrada observando los platos de la balanza… es aquí donde se halla el mensaje de la obra. Al poner las monedas y el libro de carácter religioso, el pintor quiso insinuar el conflicto entre la avaricia y la oración que había en esa época, haciendo introducción de la nota satírica en sus pinturas.
Al igual que en esta obra, en muchas otras de Quentin Massys se puede percibir un tono de crítica a la sociedad capitalista de su tiempo, así a este artista se le consideró uno de los iniciadores de la pintura de sátira social.
Con información de: Arte historia | Arte la guía 2000 | Factoría histórica
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