Tal como lo explica la OMS (Organización Mundial de la Salud) la mutilación genital femenina (MGF) comprende todos los procedimientos consistentes en la resección parcial o total de los genitales externos femeninos, así como otras lesiones de los órganos genitales femeninos por motivos no médicos. Esta representa una actividad que es reconocida como una violación los derechos humanos de niñas y mujeres.
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La MGF es una práctica que no genera ningún tipo de beneficios a la salud de mujeres y niñas que deben pasar por ella. Puede producir hemorragias graves y problemas urinarios, y más tarde causar quistes, infecciones, complicaciones del parto y aumento del riesgo de muerte del recién nacido. Además de todos los problemas físicos, los problemas psicológicos también salen a relucir en este tipo de prácticas, depresión, baja autoestima, entre otros son algunos de los más comunes.
A pesar de las constantes luchas de Organizaciones que resguardan los derechos humanos estas prácticas siguen siendo realizadas en varias regiones del mundo argumentadas en temas religiosos, políticos o culturales. Por ejemplo en varias regiones esto se practica a fin que la niña sea aceptada socialmente por su comunidad, en otros casos es considerado parte de la crianza y la preparación para la vida adulta y el matrimonio, así como también para resguardar su virginidad hasta el comienzo de su vida cónyuge.
Este tipo de prácticas son inhumanas y representan una discriminación hacia la mujer, sin embargo, las cifras son alarmantes y en regiones como África, Oriente Medio y Asia existen más de 200 millones de mujeres y niñas vivas que han sido víctimas de la MGF. A pesar de ello, las las luchas de la OMS, la UNICEF y otras organizaciones jamás cesan a fin de eliminar este tipo de costumbres.
Por Maria Gabriela Roa / @Gabyroab / Culturizando
Con información de: Organización Mundial de la Salud (OMS)
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Autor:
María Gabriela Roa
