Enigmática y realista, para muchos suele ser la Mona Lisa holandesa por la similitud que existe entre ambas.
La joven de la perla es un óleo sobre lienzo pintado por el artista holandés Johannes Vermeer en 1665. La obra está expuesta en la Galería Real de Pinturas de Mauritshuis en La Haya, Países Bajos.
También conocida como Muchacha con turbante está considerada como una de las obras maestras de Vermeer. En ella resalta un pendiente de perla que le da nombre a la composición.
Lo más característico de este cuadro, es la procedencia de su modelo. Se dice que no es un retrato sino un “tronie”, es decir, una pintura de una figura imaginaria.
La modelo aparece en un fondo negro, de perfil con el rostro a tres cuartos. Su mirada se dirige hacia el espectador y la boca se abre ligeramente, dándole un poco más de realismo a la imagen.
Vermeer fue un maestro de la luz, y muestra de ello es la suavidad que reflejó en la cara de la muchacha, los destellos de sus labios húmedos y la perla brillante. De igual manera se puede detallar su uso en los ojos y en el blanco del cuello de la camisa. Es una pintura hecha luz.
En la “Mona Lisa del Norte”, destaca la cristalina y típica tranquilidad característica de la mayoría de las obras del holandés. Esta transmite alegría, esperanza y armonía.
Ha servido de base para la autora Tracy Chevalier, quien se inspiró en ella para escribir una novela ficticia sobre la joven y el pintor. Posteriormente fue adaptada al cine por el director Peter Weber, con la participación de Scarlett Johanson como Griet (la joven de la perla).
El cuadro fue comprado por Arnoldus Andries des Tombe en una subasta realizada en La Haya en 1881. Su costo fue de tan solo 2 florines y 30 céntimos, pues en ese momento su estado de conservación era muy malo. Al morir Des Tombe, sin dejar herederos, esta obra y otros cuadros fueron donados al museo Mauritshuis en 1902.
Pialet Narváez | Culturizando
Con información de: Wikipedia / mauritshuis.nl / artehistoria / ecured
--
--