Mantener un ritmo de vida saludable cuando se está fuera de casa es complejo, sobre todo en el tema de la alimentación. Para nadie es un secreto que en la calle es muy fácil dejarse llevar por lo primero que se presente y así llenarse de comida rápida, con mucha harinas y azúcares. Por eso, hoy hemos decidido compartir un post con los mejores consejos para comer saludable fuera de casa.
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Cuidar de nuestra alimentación es una de las decisiones más acertadas que se pueden tomar en la vida, sobre todo si esta decisión se toma desde la juventud. El consumo de alimentos ultraprocesados sumado a la rutina acelerada a la que estamos sometidos en los tiempos actuales, a veces impide que hagamos todas nuestras comidas dentro de casa.
Los consejos para mantener una alimentación saludable y equilibrada ocupan una diversa variedad de opciones que pueden adaptarse a cualquier ritmo de vida. De hecho, aunque en una primera instancia pueden parecer complicados de implementar, la sola práctica continua y con propósito de las mismas ayudará a gozar de una mejor alimentación que traerá como resultado un mejor estado de salud.
Llevar aperitivos saludables
Los aperitivos saludables representan el primer consejo para trabajar en esta materia. Salir a la calle genera esfuerzo y eso ocasiona que las energías del cuerpo disminuyan y que solicite nutrientes para continuar con las actividades. Esto se manifiesta con el hambre y los deseos inmediatos que tenemos de cubrir esa demanda.
Llevar aperitivos saludables no tiene que volverse un quebradero de cabeza porque existen alternativas que no implican pasar más de 5 minutos en la cocina. Por ejemplo, tomar un yogurt natural, cortar algunas frutas o preparar un mix de frutos secos.
En caso de que se tenga un tiempo más disponible, será posible preparar algunos aperitivos sencillos y deliciosos después de comprar aceite de oliva virgen extra, como panes tostados rociados con aceite, ensaladas simples con tomates, pepino y un chorrito de aceite o algunas verduras horneadas con aceite y especias.
Planificar con anticipación
En este caso, se puede avanzar a través de dos modalidades. La primera es planificar las comidas para hacer en casa y, la segunda, investigar los menús de algunos restaurantes que tengan disponible la información vía online y tomar decisiones en referencia a ellos.
Gracias a que suelen tener disponibles reseñas, será más fácil tomar buenas decisiones. A la hora de elegir es recomendable optar por platos con verduras, frutas, proteínas magras y granos integrales que estén preparados a la parrilla, al vapor, asado o salteado, evitando caer en la trampa de los fritos y empanizados.
Controlar las porciones
Educarse para consumir la cantidad de comida correcta es lo ideal. Se puede aprovechar la compañía de familiares o amigos para compartir o, en su defecto, solicitar en el restaurante que se sirvan porciones más pequeñas. En caso de que esto último no sea posible, hay que comer lo justo y lo demás pedirlo para llevar.
Beber agua
Cargar con una botella de agua potable propia tiene doble beneficio: ayuda a mantenerse hidratado y evita caer en el deseo de consumir otro tipo de bebidas que no son beneficiosas para la salud, como las gaseosas o las bebidas alcohólicas.
Sé flexible
La flexibilidad es algo que nos resulta positivo a todos y este tema no es la excepción. Disfrutar de una comida que no sea tan saludable eventualmente es favorable porque permite mantenerse constante en el camino y no sentir frustración. Eso sí, hay que desarrollar el autodominio para evitar excesos.
Estos consejos son lo que cualquier persona que desee practicar hábitos de alimentación saludable necesita. No es fundamental que todos se implementen de una vez. Más bien es importante ir avanzando paso a paso para asegurar que todo funcione como debe ser y se mantenga a lo largo del camino, evitando así que se abandone el camino.
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Autor:
culturizando.com
