Las ciudades son parte esencial de la historia humana. Desde épocas antiguas la construcción de lugares seguros y cómodos para asentarse ha sido uno de los aspectos más esenciales para las personas. En muchos casos el origen de las ciudades tiene que ver con una necesidad, más que por comodidad. Este es el caso de Venecia.
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Venecia es uno de los sitios turísticos más visitados en todo el mundo. Aunque muchos admiran su arquitectura y el hecho de que no posee casi calles, sino canales de agua, no todos conocen la historia de su construcción. La ciudad está compuesta por una serie de islas que forman un archipiélago en medio de la laguna de Venecia ubicada en el mar Adriático. Detrás de esta maravillosa ciudad está un reto de arquitectura para el momento de su construcción.
La historia de la construcción de Venecia se remonta al siglo V d.C. Luego de la caída del Imperio romano de Occidente los bárbaros del norte de Europa realizaban ataques constantes a los territorios previamente romanos. La población tuvo que cambiar de locación para escapar de estos ataques y terminaron formando un pequeño asentamiento en lo que hoy en día es Venecia, aunque para ese momento era una ubicación temporal.
Después de su creación la ciudad pasó a formar parte del Imperio romano de Oriente. Con la caída definitiva de este imperio, Venecia se convirtió en una ciudad-estado independiente y en un puerto importante que conectaba el comercio de occidente con el de oriente.
Venecia, una ciudad con bases de madera
Aunque a simple viste Venecia parece estar sobre el agua, en realidad está construida sobre una base sólida. Para lograr tener un cimiento estable se cavaron cientos de canales en el suelo arenoso, para luego para apuntalarlo con estacas de madera de aproximadamente cuatro metros de longitud clavadas en el fondo. Después de colocar suficientes estacas de madera se construyó una plataforma de madera encima. Luego, sobre esta plataforma se edificó la ciudad.
Para lograr esto, los venecianos encargados de la construcción buscaban madera de bosques de países cercanos como Croacia, Montenegro y Eslovenia que luego eran transportados en barco hasta Venecia.
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Ahora bien, el éxito de la estrategia de utilizar madera está en el hecho de estar sumergidas debajo del agua. La madera se descompone por culpa de microorganismos como hongos y bacterias. Sin embargo, en este caso, al estar sumergida la madera de las estacas no está expuesta al oxígeno. Sin oxígeno los microrganismos no sobreviven y la madera no sufre de ningún desgaste. De igual forma, el contacto constante con el agua salada del mar la petrifica y la convierte en un material aún más resistente.
Es por esto que hoy en día existen diversas zonas en Venecia que todavía tienen como base madera de miles de años de antigüedad. Sin embargo, el peso de la ciudad empuja poco a poco la tierra fangosa en la que está construida y exprime el suelo, razón por la que ocurren inundaciones periódicas.
Actualmente muchos expertos advierten que la ciudad estará en peligro durante las próximas décadas si el nivel del mar sigue subiendo debido al calentamiento global.
Con información de Historias de nuestra historia / Youtube / IWOFR / Imagen: Shutterstock
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Autor:
Ricardo García M
