Apodado por muchos críticos como el más grande cineasta de todos los tiempos, Ingmar Bergman nos regaló historias que han tenido una profunda influencia en el cine mundial. El director retrató las inquietudes humanas de forma visceral, natural y con un toque especial… ¡Conoce sus cinco mejores filmes!
Ernst Ingmar Bergman (Suecia, 1918 – Ibídem, 2007) fue un guionista y director de cine y teatro sueco. De padre luterano, se crio bajo una profunda y arraigada creencia religiosa, cuyo contenido definiría sus películas posteriormente. Al terminar bachillerato, se licenció en Letras e Historia en la universidad, para luego dedicarse de lleno a estudiar cine y teatro, considerando que estos dos tipos de arte se adaptaban más a sus necesidades artísticas.
Cuando Bergman decidió trabajar para el Teatro de la Ópera Real de Estocolmo, no era un hombre de creencia luterana, ya que más bien se había interesado por la metafísica y varios elementos en torno a esa materia.
El primer guion para largometraje lo escribió en 1944, llamado Tortura, cuya filmación fue dirigida por el sueco Alf Sjöberg. El filme fue un éxito y, a partir de allí, no pararía de escribir y dirigir historias. Si bien a partir de su ópera prima fue conocido en parte de Europa y Norteamérica, no es hasta la película Sommarlek (1951) que logra hacerse conocido en el cine latinoamericano.
Algunos de los temas recurrentes de su obra son la muerte, las relaciones personales, el dolor y el amor, la existencia humana, las fronteras entre la sombra y la luz, la espiritualidad y la desesperanza. Apodado por muchos como “el cineasta más importante de todos los tiempos”, Bergman tuvo múltiples colaboradores recurrentes, musas y una amplia trayectoria cinematográfica hasta su fallecimiento, en 2007.
Ingmar Bergman: sus cinco mejores películas
El séptimo sello (1957)
La muerte, uno de los temas obsesivos para el director, se desarrolla en este filme mediante una premisa aparentemente sencilla: un hombre se sienta con la muerte a jugar una partida de ajedrez, para tratar de retrasar el inevitable destino. Mientras el ente y el ser humano conversan debaten temas como la existencia, la vida, la fe, las enfermedades y las supersticiones. Está ambientada durante la peste negra, en la época medieval.
El guion, escrito por Bergman, se basa en una pieza teatral escrita por él llamada Pintura sobre tabla. Considerada una obra maestra en la historia del cine, muchas de sus escenas más icónicas han sido reproducidas, homenajeadas y parodiadas. Tiene 8,2 estrellas en el sitio especializado IMDb.
Persona (1966)
Producida, escrita y dirigida por Bergman, la cinta sigue a dos mujeres, una de ellas es enfermera y la otra una paciente. La paciente ha dejado de hablar y, para tratarla, la profesional la lleva a una cabaña alejada, en donde ambas comenzarán a establecer una conexión profunda. Estuvo protagonizada por Bibi Andersson y Liv Ullman (colaboradoras recurrentes del director en sus posteriores películas).
El argumento tiene como tema central la identidad y la identificación, elementos que se refuerzan visualmente a través de efectos especiales y trucos de producción. Por la complejidad de la historia, el filme fue recortado. Fue candidata a los Premios Oscar como Mejor película extranjera y es considerada, al igual que El séptimo sello, una de las mejores producciones de la historia.
Gritos y susurros (1972)
El intenso drama que viven tres hermanas tras enterarse que una de ellas le queda poco tiempo de vida es retratado por las intérpretes Liv Ullman, Ingrid Thulin y Harriet Handersson (actrices fetiche del guionista, junto con Bibi Andersson), quienes tienen un aspecto fantasmal y conviven en un espacio rojo intenso, profundamente simbólico a nivel visual. Las hermanas han atravesado la muerte de su madre y, durante todo el filme, viven un complejo recorrido que trae a colación temas como el sufrimiento, la fe y la psique femenina.
La fotografía estuvo a cargo de Sven Nykvist, quien prestó su trabajo en varias ocasiones a Bergman. Obtuvo cinco nominaciones a los Premios Oscar, incluyendo Mejor película, y fue un éxito comercial y crítico. Tiene 8,8 estrellas en el sitio IMDb.
Secretos de un matrimonio (1973)
Originalmente escrita como una mini serie de televisión, en años posteriores fue editada como una película. El argumento sigue a una pareja que lleva casada diez años y atraviesa un momento crítico y decisivo para su relación. El filme retrata, con una crudeza incesante, la incapacidad del ser humano para dejar de lado su cinismo y egoísmo, antivalores que no les permite reconciliarse por completo.
La versión televisiva cuenta con seis episodios. La obra gozó de éxito a nivel internacional y obtuvo una nominación a los Globos de Oro. Tiene 8,4 estrellas en el sitio web especializado IMDb.
Fanny y Alexander (1982)
Fanny y Alexander es uno de los filmes más populares de Bergman, considerado por muchos críticos la obra maestra del director. Ambientada a inicios del siglo XX en Suecia, la historia sigue a unos hermanos que tienen un padre castrador y exigente. Sus vidas se alteran con la llegada de un rabino y empezarán a experimentar situaciones mágicas, cómicas y trágicas.
La cinta posee tintes biográficos, ya que el cineasta se basó en algunas experiencias de su vida en la infancia. Tiene 8,1 estrellas en el sitio web especializado IMDb. Aunque su versión original de 312 minutos fue creada para televisión, se editó una versión de 188 minutos para cine. La excelente elaboración le valió cuatro Premios de la Academia, siendo una de las cintas extranjeras más laureadas de la historia.
Entre otras producciones conocidas del director se podrían nombrar ‘Un verano con Mónica’ (1953), ‘Fresas salvajes’ (1957), ‘Sonata de Otoño’ (1973) y ‘Saraband’ (2003).
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Con información de IMDb / Wikipedia / Fotogramas /
Imagen portada: Wikipedia
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