Del latín infinitus, infinito es aquello que no tiene (ni tendrá) término o fin. El concepto se utiliza en diversos ámbitos, como la matemática, la filosofía y la astronomía.
El símbolo de infinito se parece a la curva lemniscata. No está claro cuál es su origen, aunque se cree que podría proceder de símbolos religiosos o alquímicos muy antiguos.
En el lenguaje cotidiano, la utilización del concepto de infinito no implica necesariamente algo sin final, sino que puede utilizarse para referirse a algo que se presenta en gran número o cuyas dimensiones son muy considerables. Por ejemplo: “Las posibilidades que nos brinda este acuerdo son infinitas”, “El teléfono sonó una infinidad de veces”.
La idea de infinito implica la existencia de diversas paradojas. Una de las más conocidas es la de un hotel infinito. Esta paradoja fue propuesta por el matemático alemán David Hilbert (1862-1943), habla de la existencia de un hotel imaginario que puede aceptar más huéspedes incluso si está lleno, ya que contiene infinitas habitaciones.
Algunas frases referentes a esta palabra:
“Quien busque el infinito que cierre los ojos.” Milan Kundera.
“El mal es ilimitado, pero no infinito. Sólo lo infinito limita lo ilimitado.” Simone Weil.
“El concepto de infinito es la barrera que el hombre ha inventado, como idea, contra el cauce imperioso de los sentimientos, que siempre están contaminados de eternidad.” Salvador Elizondo.
“¡El amor es ilimitado, sin fronteras, infinito! Las cosas materiales son limitadas, circunscritas, finitas. Nunca podréis expresar adecuadamente el amor infinito con medios finitos.” Abdul Baha.
“En un universo infinito, muchas cosas escapan a la razón humana.” Carlos Ruiz Zafón.
“Ahora y aquí cuadra bien la palabra fin, pariente de infinito y hermana menor de confín cerrado.” Erri De Luca.
Por Fernando Zerpa | Culturizando
Con información de: Definicion.de| Frasesypensamientos.com.ar
--
--