La historia de Tonya Harding se tergiversó por tanto auge mediático, pero ha podido aclararse y reivindicarse con el tiempo. Conocida como patinadora desde los 80, su tormentosa vida personal y un escabroso incidente la pusieron en la lista negra de la sociedad… ¡Te contamos su verdadera historia!
Tonya Maxene Harding nació el 12 de noviembre de 1970, en el seno de una familia desestructurada, en un barrio de clase media baja de Portland, Estados Unidos. De pequeña, Harding aprendió mecánica con su padre, Albert, y, según sus declaraciones, recibió abusos físicos y psicológicos por parte de su madre, LaVona Golden, desde temprana edad.
Golden trabajaba de camarera para intentar cubrir los gastos y, antes de tener a su hija, se había casado unas cinco veces. Albert terminó por huir del conflictivo hogar, dejando a Tonya bajo la supervisión total de su exmujer.
Intentando escapar de su arisca madre, Harding entró en contacto con el patinaje a los cuatro años, pero comenzó a considerarlo un oficio a partir de la década de los 80, yendo a entrenar en sus momentos libres cuando estaba en la preparatoria. Cuando comenzó a competir profesionalmente terminó por abandonar los estudios de educación media y obtuvo un Diploma de Equivalencia General (en inglés GED).
Tonya Harding a la pista de patinaje profesional
Harding no tenía las cualidades físicas ni las condiciones económicas que requerían los estereotipos del delicado patinaje artístico: era una mujer de complexión gruesa, cabello rebelde, expresión gruñona y trajes cosidos a mano. Compitió en algunos circuitos sin lograr distinciones demasiado relevantes hasta 1991, cuando se convirtió en la primera patinadora americana en realizar un triple salto axel y la segunda en toda la historia del deporte, considerado el más difícil de todos.
Participó en el Campeonato Mundial de 1991, en el Skate America (1991), en el Campeonato de Estados Unidos (1992 y 1993) y en los Juegos Olímpicos de Invierno (1992 y 1994).
Los medios y las competencias de gran calado ya no podían ignorar su talento. Antes de su salto a la fama, Harding había contraído matrimonio con Jeff Gillooly en 1990, un hombre con el que mantenía una tóxica relación reinada por el abuso y las reconciliaciones. Gillooly y Harding se divorciarían en 1993, pero continuaron viéndose.
Incidente con Nancy Kerrigan, teorías y repercusión
Con todo y sus pequeños éxitos, Harding no conseguía ser la princesa del hielo que todos deseaban y no recibía propuestas de patrocinio. Su reputación cayó en picada cuando Nancy Kerrigan entró al juego, una joven patinadora de exuberante belleza, rasgos delicados y trajes preciosos. Kerrigan era todo lo opuesto a Harding y, a pesar de su supuesta amistad, los medios de comunicación no tardaron en crear una rivalidad entre las mujeres.
Cerca de la víspera de los Juegos Olímpicos de Invierno de Lillehammer de 1994, Kerrigan fue atacada por un hombre encapuchado, que la golpeó con una barra de hierro en las rodillas. Se suponía que Harding y su rival debían competir en los juegos, por lo que la opinión pública señaló a Tonya como la autora intelectual. Las averiguaciones señalaron a Shawn Eckardt, un conocido de Harding, como el autor material del ataque, y su exmarido Jeff Gillooly, el cual había orquestado.
Nancy se recuperó del accidente y viajó junto con Harding a la competencia. La cobertura de la competición fue extraordinaria y la expectación sobre cuál patinadora ganaría se erigió como una cortina de humo. Harding tuvo un desempeño regular, llegando incluso a llorar en la pista por tener un patín roto. Kerrigan tampoco resultó ganadora, quedando en segundo lugar.
Tonya regresó derrotada moral y emocionalmente a Estados Unidos. Confesó no haber sabido del ataque hacia su rival, pero sí conocer detalles posteriores a la arremetida y ocultar detalles a la policía. Fue expulsada de por vida del circuito de patinaje estadounidense y declarada culpable de obstrucción a la justicia, por lo que se le asignaron horas de servicio comunitario y una multa de miles de dólares.
Actualidad y biopic
Harding se dedicó al boxeo profesional luego de la expulsión, aunque entrena patinaje en hielo todo el tiempo a modo de hobby. Trabajó durante un tiempo en talleres de soldadura y fabricación de metal. El escándalo de Nancy se convirtió en uno de los más famosos en la historia del deporte y la sumió en un intenso escrutinio público, por el que intentó suicidarse en una ocasión.
Se casó por segunda vez con Michael Smith en 1995, pero se divorciaron al año siguiente. En 2010 se casó por tercera vez con Joseph Price, tomó su apellido y tuvo un hijo llamado Gordon (n. 2009).
Su historia se cuenta en la galardonada cinta I, Tonya (2017), protagonizada por Margot Robbie y dirigida por Craig Gillespie.
Con información de Wikipedia / La Vanguardia / El País / YouTube
Imagen portada: Wikipedia
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