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¿Existe la buena suerte? La eterna conversación entre Boecio y la «Dama Filosofía»

¿Existe la buena suerte? La eterna conversación entre Boecio y la «Dama Filosofía»

El filósofo alemán Karl Jaspers señaló alguna vez: “Las preguntas, en filosofía, son más esenciales que las mismas respuestas”.  Y es precisamente la existencia de la buena suerte, una de las cuestiones filosóficas con mayor peso en el transcurso de la historia de la humanidad. ¡Te invitamos a conocer las reflexiones de Boecio y la «Dama Filosofía» durante la época medieval!

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¿Quién fue el filósofo Boecio?

Anicio Manlio Torcuato Severino Boecio fue un filósofo latino romano, nacido aproximadamente en el año 477 d. C, en Roma, Italia. También conocido como San Severino Boecio, su actividad comprendió distintas disciplinas compaginadas entre las ciencias exactas, como la estadística y la aritmética. 

Boecio trascendió en la historia y, particularmente en las humanidades, por haber sido un precursor del neoplatonismo. Asimismo, su obra se caracterizó gracias a su posición estoica y a sus estudios sobre la filosofía cristiana de Occidente.

Boecio fue el autor de Consolación de la filosofía («Consolatio Philosophiae», en latín) considerada la obra más influyente en diversos períodos de la historia, desde el final del período clásico, el cristiano medieval, y el Renacimiento temprano.

Según Boecio, ¿quién es la Fortuna?

“Ningún hombre puede estar realmente seguro hasta que haya sido abandonado por la Fortuna” – Dama Filosofía, Consolación de la filosofía (524 d. C)

Consolación de la filosofía corresponde a una serie de reflexiones que aluden a una conversación entre el filósofo y la Dama Filosofía, quien consuela al autor y lo guía hacia el conocimiento de la verdadera naturaleza de la fama y la riqueza, describiéndolas siempre como elementos transitorios en la vida de los hombres.

Dentro de las reflexiones, la Fortuna es un personaje fundamental. De ella se habla haciendo referencia a la diosa de la suerte -buena o mala-, que conduce el destino de los hombres. Ella, a su vez, también es la deidad de la fertilidad, de acuerdo con la mitología romana.

Representación de Fortuna en el Museo Nacional de Historia de Constanza, Rumania – Fuente: Cristian Chirita (Wikipedia).-

 

Boecio, entonces, emplea a la Dama Filosofía como recurso explicativo para plantear el hecho de que la felicidad se origina desde lo más profundo del individuo, y que la virtud es todo cuanto realmente se tiene.

La Dama Filosofía establece que la mente y el espíritu son «el único bien verdadero», relegando a la fama y a la riqueza como asuntos inferiores.

Es importante señalar que la Dama Filosofía corresponde a una figura femenina que visita a Boecio, mientras se encontraba en prisión y lo consuela sobre su destino.

Entonces… ¿Existe la buena suerte?

La Dama Filosofía, en virtud de establecer las prioridades que el ser humano debe alcanzar antes de preguntarse si existe, o no, la buena suerte, manifestó lo siguiente:

«En la realización de cualquier acto humano entran dos factores: la voluntad y el poder. Si uno de los dos falla, nada puede llevarse a cabo. Si falta la voluntad, no se inicia siquiera acto alguno, puesto que no se quiere; y si no existen facultades o poder, sería inútil toda voluntad» – Dama Filosofía.

La personificación de la filosofía explica que, de acuerdo con la mitología romana, la entrada del templo de Júpiter (Zeus, según los griegos) contaba con dos toneles, uno lleno de bienes y otro de males.

Con ello, se refiere a que, aunque la abundancia, los bienes imaginables y en síntesis, la buena fortuna, formara parte de la vida; no cesarían las quejas y los lamentos.

 

Grabado de la Fortuna (s. XVI) – Fuente: Hans Sebald Beham (Wikipedia).-

En su libro, Boecio, como todo buen filósofo, se ocupa de cuestiones propias a la naturaleza, la predestinación y el libre albedrío. Gracias a su metáfora de la Dama Filosofía, el lector comprende por qué los hombres malvados son capaces de prosperar, y por qué los buenos son arrastrados por la ruina. Todo se trata de un equilibrio entre la naturaleza humana, la virtud y la justicia.

Boecio, quien estuvo altamente influenciado por Platón y sus diálogos, coincidió con las directrices espirituales que existían en torno a la piedad medieval, donde el sufrimiento conduce posteriormente a la virtud y a la felicidad en Dios.

“Hay algunos que opinan que el azar es una causa, aunque oculta al entendimiento humano, por ser algo divino y completamente extraordinario” – Aristóteles.

Con información de: Consolación de la filosofía / El Sigma / Mitos y Leyendas / Biblioteca Digital Mundial

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