Menú
Escafismo: Conoce la tortura más terrible e inhumana de la historia

Escafismo: Conoce la tortura más terrible e inhumana de la historia

En la antigüedad la variedad de torturas existentes eran innumerables e indescriptibles… Incluso, hoy en día, nos seguimos horrorizando por los métodos empleados para el castigo de las viejas civilizaciones. Entre estos terribles tipos de tortura, se encuentra uno creado por los persas, utilizado como una de sus mayores reprimendas ante una falta.

INTERESANTE

 

El escafismo es una de las torturas más inhumanas conocidas a lo largo de la historia – Imagen cortesía de: Muy Interesante.-

Gracias a las crónicas escritas en el siglo I por Plutarco y a las diferentes descripciones realizadas por los griegos que visitaron el Imperio persa a lo largo de los años, logramos conocer el escafismo. Este es uno de los métodos de tortura más dantescos y aberrantes de la historia.

 

Esta tortura inhumana utilizada por los persas tuvo durante toda su aplicación diferentes variantes, que eran realizadas por los encargados de suministrar el castigo, dependiendo también del delito por el que se condenaba al individuo. Todas y cada una de sus versiones consistían en una situación tan terrible, que para la época era considerada una de las peores condenas.

 

La metodología más utilizada consistía en introducir al individuo en una caja de madera, con varios agujeros por los cuales debía sacar sus extremidades. Sus brazos, piernas y cabeza, fuera de la caja, eran untados con miel y leche, de forma que los diferentes bichos e insectos se acercaran a alimentarse de estas, depositando también sus larvas en la piel del condenado.

 

Al mismo tiempo se obligaba a la persona torturada a que ingiriera alimentos podridos y en mal estado, provocándole así un malestar terrible en el cuerpo. Los desechos producidos por el individuo permanecían en la caja, sin ningún tipo de limpieza, volviendo aún peor la tortura ya aplicada.

 

Tanto el excremento, como los otros desechos producidos por el torturado, aunados a la sustancias dulces que eran esparcidas por su cuerpo, se convertían en el sustento de los mencionados insectos y sus larvas. Estos consumían no solo los elementos externos, sino que poco a poco iban alimentándose de la carne del individuo, eclosionando sus ojos, entre otras cosas.

 

Se le suministraba agua al individuo constantemente, así como algunos alimentos en buen estado, para que este no muriera de deshidratación o descompensación de forma repentina, logrando prolongar por días, y hasta semanas, esta terrible tortura. El sufrimiento de la persona encerrada en la caja era continuo y atacaba diferentes partes de su cuerpo, el cual terminaba colapsando lentamente en agonía.

Generalmente los prisioneros eran encerrados en cajas de madera, en los que quedaban por fuera sus extremidades – Imagen cortesía de: QuHist.-

Generalmente se ubicaba la caja en un lugar al sol o flotando en un pequeño charco o laguna estancada, de forma que estuviera totalmente expuesto al ambiente y atrajese la mayor cantidad de insectos posibles. Dependiendo de la alimentación y la resistencia del individuo, se conoce que, generalmente, duraban entre 15 y 20 días en esta condición.

 

Otra de las variantes más populares de esta tortura, que la hacía aún más terrible, consistía en introducir al condenado en el cuerpo de un caballo muerto, en vez de en una caja de madera, lo que aumentaba la rapidez del proceso de descomposición y putrefacción y, al mismo tiempo, ayudaba a la llegada de más insectos.

 

Por Daniela Iglesias Ribeiro | @Danielair_ | Culturizando

Con información de: MUY INTERESANTE | QUHIST | DESCUBRIR LA HISTORIA

 

--

--


Lo que más gusta

Lo más destacado