Muchas personas disfrutan de los juegos de azar, ya sea apostándole a un caballo o jugando al póquer por Internet. La mayoría de las personas que juega no tiene ningún problema, pero algunas otras pierden el control sobre el juego. Los signos de que existe un problema incluyen:
Sentirse mal después de jugar pero no dejar de hacerlo
Jugar con el dinero que se necesita para otras cosas
Cuando estos síntomas se cumplen estamos ante un apostador patológico.
¿Qué es la apuesta patológica?
Las personas que son apostadores patológicos no pueden controlar sus impulsos de apostar. Terminan perdiendo mucho dinero y acaban teniendo problemas con las finanzas. Apostar generalmente les causa problemas en el trabajo, en el colegio o en sus relaciones personales. Sin embargo, a pesar de estos problemas un apostador patológico continuará apostando.
Los hombres o las mujeres de cualquier edad pueden ser apostadores patológicos. La depresión, el beber alcohol y usar drogas por lo general van mano a mano con la apuesta patológica.
¿Cuál es la causa de la apuesta patológica?
Muchos expertos piensan que la apuesta patológica es una adicción a consecuencia de la sensación de «excitación» que uno siente cuando gana y pierde dinero. Las experiencias y el tipo de personalidad del individuo también juegan un rol muy importante.
¿Un apostador patológico puede ser tratado?
Sí. Sin embargo, la apuesta patológica puede ser difícil de tratar puesto que usted puede no querer contarle a los demás acerca de su problema. Primero, usted tiene que admitir que tiene una problema con las apuestas diciéndole a su familia y a sus amigos. Segundo, usted puede inscribirse en Apostadores Anónimos – o Jugadores Anónimos- un grupo de ayuda para personas con problemas por causa de las apuestas. Pregunte en su urbanización o en la iglesia más cercana que seguro allí le brindarán la información necesaria.
Al igual que en otras adicciones, también existe un grupo de apoyo para las familias. Su médico de confianza puede trabajar con usted y con su familia durante el tratamiento.
Para mayor ayuda, su médico lo puede referir a un experto en salud mental. Esta ayuda puede incluir hablar acerca de su problema con las apuestas. Además puede incluir consejo acerca de cómo comprender sus deseos intensos de apostar y cómo manejarlos. El tratamiento para los apostadores patológicos también puede incluir tratamiento para la depresión o el abuso de substancias si es necesario.
Lo importante es reconocer el problema y desear cambiarlo, con voluntad y poco de esfuerzo todos los obstáculos pueden superarse.
@Culturizando
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