Seguro te suena el nombre de Mijaíl Kaláshnikov, porque se trata del padre del famoso fusil de fuego rápido AK-47. Hoy te contamos sobre el hombre tras la conocida arma.
INTERESANTE
Mijaíl combatió en la Gran Guerra Patria como suboficial de carros y fue allí donde comenzó a demostrar su gran interés por las armas de fuego. En 1941 fue destinado a Leningrado (actualmente San Petersburgo) para trabajar en la mejora de tanques. Estando allí, mientras dirigía un carro de combate T-34 contra los alemanes, fue herido en un brazo y enviado al hospital desde donde ideó nuevas armas basándose en las quejas de sus compañeros sobre las anticuadas carabinas soviéticas.
Para 1944 Kaláshnikov ya tenía finalizado un fusil de asalto de fuego rápido, pero continuó perfeccionando el diseño mientras el ejército ya lo probaba. En 1947, su diseño final era el AK-47 (acrónimo de Avtomat Kaláshnikov, modelo 1947), que fue adoptado como el fusil de asalto estándar del Ejército rojo en 1949.
El éxito del arma es historia. Ha sido el arma oficial por los ejércitos de los países del Pacto de Varsovia. En la Guerra de Corea fue utilizada por el ejército chino (suministrada por la URSS). Occidente sabía y conocía de esta arma pero nunca tuvieron una en sus manos hasta la Guerra de Vietnam, en que el ejército de Vietnam del Norte y del Vietcong la utilizaron contra el ejército de EE. UU. y es cuando los países occidentales la consiguen a través de prisioneros capturados. Entonces fue desarmada y estudiada para conocer su mecanismo. Inclusive existe una portada de la revista Life de 1967, en donde tropas estadounidenses tienen en su poder esta arma.
Es el arma oficial de los ejércitos de 55 países e incluso figura en los escudos de varios Estados, en particular de África por su contribución a la descolonización. A diciembre de 2007, el AK-47 era el arma de fuego de mayor producción de la historia, con cerca de 80 millones de unidades manufacturadas. También es el arma preferida por carteles de la droga, guerrillas y fuerzas armadas orientales.
Por este invento Kaláshnikov recibió múltiples reconocimientos, desde la Órden al Mérito Militar hasta Héroe de la Federación Rusa… sin embargo no todo fue tan exitoso para Mijaíl. La URSS nunca patentó sus derechos de inventor y se dice que Kaláshnikov jamás recibió dinero alguno por los más de cien millones de sus fusiles que se han vendido en todo el mundo.
Pero no solo en lo económico Kaláshnikov se sentía inconforme. En una carta antes de morir en 2013 dirigida al patriarca Cirilo I de Moscú manifestó lo siguiente:
“Mi dolor espiritual es insoportable. Sigo haciéndome la misma pregunta sin resolución: si mi rifle le quitó la vida a personas, ¿podría ser que yo, un creyente cristiano y ortodoxo, sea culpable de esas muertes, aun cuando fueran enemigos?
Cuanto más vivo, más se adentra esta pregunta en mi cerebro y más me pregunto por qué el Señor permitió al hombre los deseos diabólicos de la envidia, la codicia y la agresión.Mi meta era crear armamento para la protección de las fronteras de mi patria.
No es mi culpa que el Kalashnikov fuera utilizado en muchos sitios con problemas. Creo que la culpa de eso la tienen esos países y no los diseñadores”.
Kaláshnikov murió en 2013 en un hospital, donde fue internado el 17 de noviembre, debido a una hemorragia gástrica, en la ciudad de Izhevsk, consecuente a los problemas cardíacos que le afectaron en el pasado.
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Autor:
Crónicas de Ares
