«Todo lo que escupe el artista, es arte», expresó alguna vez Kurt Schwitters, uno de los principales exponentes del arte dadá en el siglo XX. Años más tarde, el escultor italiano Piero Manzoni se tomaría estas palabras en todo su sentido literal, al presentar su propio excremento enlatado como una auténtica obra de arte conceptual.
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Piero Manzoni y el body art interior
Obra: ‘Mierda de artista’ de Manzoni.-
El body art interior es el término que históricamente se emplea para referirse a la técnica que el escultor italiano utilizaba para la elaboración de sus obras.
(Detalle) Firma del artista.-
Partiendo de la premisa del pintor dadaísta Kurt Schwitters, Manzoni se desarrolló en el ámbito artístico desde una perspectiva un tanto crítica e irónica, en la cual, si su cuerpo era un medio donde se producía arte, todo lo que saliera de él, correspondientemente lo sería también.
Fotografía de Piero Manzoni firmando el brazo de una mujer.-
Manzoni, quien pertenecía al movimiento del arte conceptual -una corriente vanguardista de la década de 1960-, compartía la filosofía de que el mensaje y el contenido de la obra es más importante que la representación física y tangible de la misma.
Muchas de las ideas de la época parten de la técnica del «ready-made» – En la foto: ‘La fuente’, atribuída a Duchamp.-
Esta corriente parte de un sinnúmero de eventos que acontecían continuamente en el ámbito político y social tanto de Europa como en el resto del mundo: el auge del movimiento feminista y, la Guerra Fría y la Guerra de Vietnam. Asimismo, estaría altamente influenciado por la técnica del «ready-made», adoptada por artistas del dadá, como Marcel Duchamp y Elsa von Freytag-Loringhoven.
Mierda de artista, una analogía para la industria
Fotografía de Piero Manzoni.-
Si bien la presentación de algo que saliera directamente de su cuerpo no era un concepto innovador para Manzoni, en vista de que previamente había gestado la idea con Huevos con huella: Devorar el arte y Aliento de artista, fue una analogía directa, impactante y controvertida la que catapultó su ascenso no solo dentro del arte conceptual europeo, sino en la industria del arte universal.
‘Aliento de artista’ (Piero Manzoni, 1961) – Originalmente se trataba de un globo inflado con el aire proveniente de los pulmones de Manzoni.-
‘Huevos con huella: Devorar el arte’ (Piero Manzoni, 1960).-
El artista, quien solo contaba con 28 años al momento del proceso creativo, fue aclamado y criticado simultáneamente. Y es que la realización de la obra tan pragmática como el título que la haría recorrer el mundo: 90 latas cuyo contenido era simplemente el excremento del artista, y decoradas en el exterior con una etiqueta que rezaba el nombre de la obra, la fecha en la que había sido “producida” o defecada y, finalmente, la firma de Manzoni.
La obra de Manzoni está conformada por 90 latas.-
El porqué se traduce actualmente como una analogía para la industria del arte, radica en el hecho de que la obra, en calidad de concepto más que de los materiales que la elaboran, hace que el espectador reflexione sobre hasta dónde llega a ser un artista un objeto de admiración.
Asimismo, al igual que la corriente artística bajo la que construye en sí misma, el arte conceptual, u otros movimientos que también defendían esta lectura, como el arte dadá, el arte povera y, en cierta medida, el expresionismo abstracto, con ironía Manzoni se enfrenta ante una sociedad de consumo.
El legado Piero Manzoni, después de la polémica
‘Mierda de artista’ (1961).-
Bien se tratase de la materialización de un egocentrismo artístico que consiguió su justificación por medio de la técnica del body art interior, o simplemente se concibiera como una broma inspirada en los preceptos de Marcel Duchamp, Manzoni consiguió que su obra se consolidara en el imaginario colectivo de los aficionados al arte, incluso con el transcurrir del tiempo.
En 2016, el ejemplar número 69 alcanzó el precio récord de la obra, siendo subastada por 275.000 euros en la ciudad de Milán. Manzoni logró, literalmente, vender su Mierda de artista a precio de oro, y si viviese para contarlo, probablemente sonreiría satisfactoriamente al darse cuenta de que su lectura sobre la sociedad de consumo, incluso en el mundo artístico de la década de 1960, trascendería hasta convertirse en lo que es hoy en día.
Fotografía del artista Piero Manzoni posando junto a las latas que conforman su obra.-
Con información de: Cultura Colectiva | ABC | Historia Arte |
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Autor:
Gabriela Herrera
