Menú
Las pinturas de Edward Hopper cobran vida en 'Shirley, Visiones de la realidad' (+ Trailer)

Las pinturas de Edward Hopper cobran vida en ‘Shirley, Visiones de la realidad’ (+ Trailer)

El director austríaco Gustav Deutsch tomó la iniciativa de trasladar al mundo real mediante una película algunas de las pinturas del artista estadounidense Edward Hopper, conocido por sus obras estáticas, que lucen casi como maniquíes de un mundo utópico.

INTERESANTE

“Shirley, visiones de una realidad” cuenta la vida de una actriz un poco conflictiva llamada Shirley cuyos pensamientos y emociones abruman totalmente su realidad. Deutsch utilizó 13 de los cuadros más emblemáticos del pintor para crear un mundo geométricamente perfecto.

Te puede interesar: Edward Hopper en 5 grandes obras

Los trece cuadros representados en la película son: Cine en Nueva York (1939), Habitación en Nueva York (1932), Habitación de hotel (1931), Oficina de noche (1943), Sol de la mañana (1952), Motel en el Oeste (1957), Excursión a la Filosofia (1959), Mujer al sol (1961), Atardecer en los Bronstones (1956), Intermedio (1963), El sol en una habitación vacía (1963) y Vagón de tren (1965),

El director quien es arquitecto, fotógrafo y cineasta,  estudió cada uno de los cuadros y creó escenografías que fueran lo más fieles posibles al estilo de Hopper. Analizó la iluminación, el uso de líneas y los colores más utilizados  por Edward para plasmarlos en una obra cinematográfica única en su estilo.

Gustav explicó que eligió plasmar las pinturas de Hopper por la intriga que le causan los protagonistas de sus pinturas; siempre viven una experiencia que no comparten con el espectador. El misterio oculto en los cuadros lo llevó a iniciar una interpretación personal sobre cada uno, y así fue como creó una historia que los involucrara  para poder traerlos pinturas a la vida.

Edward Hopper solía plasmar en sus pinturas la cotidianidad de la vida en la ciudad, sus personajes se mantienen sumergidos en una tranquilidad casi nostálgica. Aquí unos ejemplos de cómo el cineasta logró transformar las pinturas en escenas cinematográficas:

“Sol de la mañana” (1952)

“Habitación en Nueva York” (1930)

 

 

Por Mary Villarroel Sneshko | @Vivodesorpresas  | Culturizando

Con información de: El ImparcialEdwardHopper.net 

--

--


Lo que más gusta

Lo más destacado