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#PalabraCulta: Origen y definición de 'afabilidad'

#PalabraCulta: Origen y definición de ‘afabilidad’

Afabilidad procede del latín affabilĭtas y hace referencia a la cualidad de afable (agradable, suave en el trato, dulce). Por ejemplo. “Me dio mucho gusto visitar al Sr. Perkins, es un hombre de gran afabilidad”, “¿A qué se debe tanta afabilidad? Sospecho que quieres pedirme algo”, “No sé si es mala persona, pero seguro que no se caracteriza por su afabilidad”.

La afabilidad, por lo tanto, puede asociarse a la amabilidad, la cortesía y la cordialidad. Cuando una persona es afable, demuestra simpatía, sencillez, franqueza y bondad en sus relaciones sociales. El sujeto afable, al recibir una visita, se muestra atento, ofrece algo para beber e intenta que el visitante se sienta cómodo.

INTERESANTE

Lo contrario a la afabilidad es la antipatía o la descortesía. En este caso, el individuo en cuestión tiene un comportamiento parco, seco y frío.

Para la religión, la afabilidad es una virtud que inclina al hombre a decir y hacer aquello que contribuye a hacer más agradable la vida social. No es lo mismo convivir y tratar con una persona afable que con otra que no muestra cortesía y respeto.

Un saludo cortés o un comentario amable pueden alegrar el día del prójimo. La afabilidad también está asociada al respeto por el orden vigente ya que permite expresar verdades que, en otro tono, causarían problemas y enfrentamientos. Un hombre puede pedir amablemente a su vecino que baje el volumen de la televisión sin necesidad de agresiones o violencia y sin alterar la convivencia pacífica; otro, en cambio, puede entrar en una discusión sin sentido por su falta de afabilidad.

Con información de: definicion.de

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