Al igual que en China y Japón, durante muchos siglos la península de Corea fue gobernada por emperadores, siendo más exactos, por la dinastía Joseon, y si bien hubo varios regentes coreanos interesantes, hoy te contamos a la más recordada, incluso conocida como la “Juana de Arco de Corea”… ¡Conoce a Myeongseong de Joseon la “reina Min”!
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La futura consorte del emperador nació en una poderosa familia noble, el clan Yeoheung Min, quienes ya habían engendrado otras esposas para emperadores anteriores. Debido a lo inteligente que era para su corta edad, después de la muerte de su padre, cierta mujer muy poderosa llamada Yeoheung Budaebuin comenzó a interesarse en ella… esta mujer era la madre del rey Gojong, su futuro esposo.
Gojong asume el poder de la dinastía Joseon a la corta edad de 12 años, mientras su padre continuaría como príncipe regente, y a los 14 años decide casarlo con Min de 16 años. Sin embargo, las mujeres de los emperadores no solían tener mucho poder y su “cargo” era técnicamente simbólico, algo que cambiaría la “reina Min”…
Las consortes de los reyes debían asistir a fiestas y encargarse de tener una amplia vida social para ganarse el amor del pueblo, pero Min no estaba interesada en este tipo de costumbres y comenzó a estudiar mucho, comportamiento que solo debían tener los hombres; irónicamente, fue precisamente por esto que empezó a ganarse el respeto de la corte y de su pueblo, ya que por su inteligencia y educación la reina Min estaba siendo parte activa del Gobierno.
La reina fomentó la educación en inglés en la escuelas coreanas y además, a pesar de que era una devota budista con creencias confucionistas, dejó entrar a misioneros cristianos a la península, porque quería expandir la cultura de su reino, pero siempre manteniendo la identidad nacional.
Sin embargo el papá del rey, Heungseon, no estaba complacido con estas conductas de su nuera, aunado a que ya la reina Min había engendrado a un heredero que murió al poco tiempo de nacer, así que decidió casar a su hijo con otra mujer ya que los emperadores podían tener varias esposas.
De igual forma, aunque al principio la reina Min había declarado que estaba “asqueada” por el rey Gojong, se sabe que posteriormente él se enamoró de ella y que ambos lograron tener una buena relación.
Gojong no se sentía amenazado por todo el poder que ella iba adquiriendo, y además la reina también se había ganado el apoyo de personas importantes del Gobierno y la sociedad. Eventualmente lograron que el príncipe regente abdicara, haciendo que todo el poder del imperio lo tuviese su esposo.
La dinastía Joseon era vista en el resto del mundo como un “reino ermitaño”, y si bien Min quiso evitar la influencia extranjera en la actual Corea, en realidad lo que quería era evitar la injerencia japonesa, una gran amenaza para ellos, y que además ya tenían una guerra con China. Asimismo, el Gobierno del rey Gojong decide acercarse diplomáticamente a China (en ese entonces gobernada por la dinastía Qing) y además al Imperio ruso, otro enemigo de Japón.
Posteriormente comienza la guerra sino-japonesa, y son los nipones quienes terminan victoriosos. Los japoneses se sentían muy amenazados por la reina Min y ya habían intentado anexar a la península coreana a la fuerza, pero no habían tenido éxito del todo, precisamente por lo reacia que era ella a Japón, así que los nipones debían quitarla del medio…
En 1895, diez hombres liderados por un general de la armada imperial japonesa, entran al palacio imperial de Gyeongbokgung, asesinan a tres mujeres y posteriormente violan y matan a la reina Min a puñaladas, para luego quemar su cuerpo en el bosque…
Tanto los coreanos como los embajadores extranjeros protestaron enormemente por el asesinato de la reina, haciendo que finalmente Japón accediese a realizar un juicio a los implicados, y aunque definitivamente hubo muchos testigos, no fueron declarados culpables “por falta de pruebas”.
El rey, quien mantuvo un profundo luto durante semanas, también debió refugiarse un tiempo en la embajada rusa de Seúl, pero luego se declaró como emperador de Corea creando así el Imperio coreano. Posteriormente ordenó que se buscaran los restos de su esposa para darle una apropiada sepultura y además el título póstumo de emperatriz de Corea.
Cabe destacar que en el panteón real, Myeongseong de Joseon (la reina Min) es la única de las mujeres con el título de “emperatriz”.
El asesinato de Min hizo que la negativa relación de Rusia y Japón se intensificara, y después de la guerra entre ambos imperios, Rusia, debido a un tratado, se vio forzada a “reconocer los intereses de Japón sobre Corea”.
Finalmente la península coreana fue anexada al Imperio japonés, poniendo fin a la dinastía Joseon, y convirtiendo a Corea en una nación ocupada por Japón durante más de 30 años, hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial…
La Juana de Arco coreana
Los coreanos han visto la figura de la reina Min como una especie de Juana de Arco, precisamente por su resistencia a la opresión japonesa y porque era básicamente por ella que los nipones no habían logrado anexar Corea a su imperio. Además de la gran relevancia que tiene en la cultura nacional coreana, la emperatriz también se ha convertido en un ícono de la cultura pop: ha sido encarnada por diferentes actrices en varias series de televisión, una película e incluso un musical.
En 2014 Corea del Norte exigió a Japón que se disculpase por el asesinato de la emperatriz.
Hasta el día de hoy Japón no se ha disculpado por el asesinato de la reina Min, pero para los coreanos ella siempre quedará en su memoria como la última emperatriz, y también como la mártir que intentó evitarles el yugo del Japón imperial…
Con información de: Hana, Dul, Talk! / Wikipedia / SOFREP / Imagen: de Wikimedia
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Autor:
Omar N. Golding
