El caos después del adiós
Una ruptura amorosa es como un terremoto emocional: todo se tambalea, y por momentos parece que nada volverá a ser igual. El vacío, la tristeza, la rabia y el miedo se mezclan como en una montaña rusa sin frenos. Y es normal.
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Tal como decía Viktor Frankl, psiquiatra y superviviente del Holocausto: «Cuando no podemos cambiar una situación, el reto es cambiarnos a nosotros mismos.» Y aunque ahora mismo suene imposible, tú también puedes transformar este dolor en crecimiento.
El duelo: no hay atajos, pero sí caminos
El duelo por una ruptura no tiene un tiempo exacto. No hay una fecha de caducidad para el dolor. Sin embargo, lo que sí puedes evitar es quedarte atrapado en él.
Aquí algunos sentimientos comunes que podrías experimentar:
- Negación: «No puede ser, seguro que volvemos.»
- Rabia: «¡No es justo! Perdí tanto tiempo con esa persona.»
- Tristeza profunda: «No voy a encontrar a nadie más.»
- Miedo al futuro: «¿Y ahora qué hago con mi vida sin esa persona?»
La clave es reconocer que todo esto es parte del proceso. Sentir es inevitable, pero estancarse no.
Lo que NO debes hacer
Tras una ruptura, hay ciertas trampas emocionales que pueden hacer que el dolor se prolongue. Evita estas acciones:
❌ Stalkear en redes sociales: Ver sus fotos solo alimentará tu ansiedad.
❌ Buscar respuestas sin fin: A veces, la verdad no traerá el alivio que esperas.
❌ Aislarte del mundo: Quedarte en casa escuchando canciones tristes no te ayudará a sanar.
❌ Intentar ser «amigos» de inmediato: Date el tiempo de sanar antes de reconfigurar la relación.
Cómo recuperar la paz mental
Acepta la realidad: No se trata de resignarse, sino de entender que una etapa terminó. Cuanto antes lo asimiles, antes podrás avanzar.
Cuida tu bienestar: Duerme bien, aliméntate sano y mantén tu rutina. Cuando el cuerpo está fuerte, la mente también lo está.
Muévete: Bailar, correr o practicar yoga te ayudarán a liberar tensiones y mejorar tu estado de ánimo.
Recupera tu esencia: Haz cosas que te apasionen, redescubre hobbies y conecta contigo mismo.
Habla y socializa: El poder de la palabra es inmenso. Conversar con amigos o un terapeuta puede ayudarte a procesar mejor las emociones.
Construye tu nueva realidad
Una vez que el dolor empiece a ceder, es momento de preguntarte:
¿Qué quiero para mi futuro?
¿Qué cosas nuevas puedo hacer que antes no hacía?
¿Cómo quiero mejorar mi relación conmigo mismo?
Haz una lista de metas y empieza a construir tu nueva versión. No se trata de olvidar a la otra persona, sino de recordarte a ti mismo que sigues aquí, y que mereces ser feliz.
Lo mejor está por venir
Superar una ruptura amorosa es un proceso, pero no el fin del camino. Como decía Paulo Coelho: «Cuando alguien se va, es porque alguien más está a punto de llegar.» Y ese «alguien» también puede ser una versión mejorada de ti mismo.
Soy Carmen Sancho, Psicóloga en Barcelona, en Castelldefels. Si no sabes cómo hacerlo, estoy para ayudarte. Escríbeme por Instagram @carmensanchopsicologa o visita mi página web carmensancho.es
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Autor:
Carmen Sancho
