Stephen King es conocido como el rey de la literatura del terror por varios motivos. En su lista de éxitos cuenta con varios títulos que no solo asustan, sino que también son capaces de quebrantar el lado más humano y sentimental del lector… tal es el caso de ‘Cementerio de animales’.
Ficha técnica
Título original: Pet Sematary – Cementerio de animales o Semeterio de mascotas
Autor: Stephen King
Año de publicación: 1983
Género: Horror
Sinopsis
Louis Creed es un médico y el padre de una familia que se muda a Ludlow Maine, a orillas de una peligrosa carretera en donde transitan vehículos de carga pesada a grandes velocidades. Luego de una serie de decesos, la familia deberá lidiar con el peso del duelo mientras comprenden que una vez muertas las cosas, es mejor dejarlas así.
¿Por qué ‘Semeterio’ o ‘Sematary’?
El ‘error ortográfico’ presente en el título no es casualidad o un descuido. En la novela se explica que el cementerio de mascotas fue construido por los niños de la localidad, y en la entrada se encuentra un cartel que reza Pet Sematary («Semeterio de mascotas» en español). Stephen King utilizó el error ortográfico para demostrar la inocencia de los niños y lo distanciados que pueden llegar a estar de la muerte y todo lo que conlleva.
El poder de Dios y la dificultad del duelo
El mayor mérito que tiene Stephen King yace en la capacidad de quebrantar el espíritu de los lectores. En muchas de sus obras, pese a que entran en el género de terror, el horror no suele ser el factor más importante y desarrollado, siendo el aspecto humano el que lleva la batuta.
En Cementerio de animales, cerca de la nueva casa de los Creed hay un cementerio de mascotas que esconde un oscuro secreto… un antiguo panteón indígena capaz de revivir a lo que sea que se entierre ahí. Ante ello, King crea el conflicto en el espectador; en caso de contar con ese poder divino, ¿estaría bien romper las leyes de la naturaleza humana y jugar con la vida y la muerte?
Hay dos muertes importantes para analizar en la obra y cómo afectan el factor humano, así que alerta de spoiler. Con el deceso del gato de la familia, Church, Louis decide traer de regreso al felino. La mascota vuelve carente de vida -pese a que no está muerta-, mostrando el factor deshumanizador y que una vez que las cosas mueren, nunca regresan.
Pese a todo ello, la verdadera disyuntiva del libro llega pasada la primera mitad. La muerte de un hijo es lo más rudo, difícil y doloroso por lo que un padre puede llegar a pasar. Todos han escuchado la frase de “por mis hijos doy mi vida”, pero ¿qué pasaría en el escenario de poder regresarle la “vida” a tus hijos?
En su intento egoísta por luchar contra el destino, Louis revive a Gage, su hijo bebé, pese a todas las advertencias que había recibido y la experiencia con Church, el gato que no volvió a ser el mismo después de regresar a la “vida”. En su intento por que todo vuelva a la normalidad, el doctor destruye la vida de la familia que quiso proteger. El miedo de la novela no está presente en los eventos sobrenaturales o los asesinatos, sino en la posición que toma el lector cuando enfrenta la inevitable muerte y en el terror de poder jugar con ella.
La pata de mono
La inspiración de Stephen King para la novela nace en el cuento de La pata de mono, de W. W. Jacobs publicado en 1902. En el relato, un poderoso talismán -la pata de mono- tiene la facultad de otorgar tres deseos a su poseedor, pero a cambio de terribles consecuencias. En el libro de King, existe la potestad de regresar a la vida a los seres queridos, aunque ellos volverán poseídos por un espíritu maligno.
La pata de mono también posee su eje en la dificultad del duelo y la lucha con el destino. Alerta de spoiler en caso de no haber leído el relato o escuchado la historia.
En el cuento, tras muerto su hijo a cambio del primer deseo, la madre pierde la cordura y el padre debe cargar con ese peso. La señora usa el segundo deseo para regresar al joven, pero el papá -sabiendo las consecuencias nefastas- pide, de manera tácita, que su hijo no regrese. Luego del último deseo, no hay ningún hecho trágico, y ello es gracias a que el padre aceptó el destino de la vida -y muerte- y que su rol como mortal es no interferir con ese camino… todo lo contrario a Louis Creed en Cementerio de animales.
Frases destacadas
- “La muerte es un misterio y el entierro, un secreto”.
- “Tal vez aprenda algo sobre el carácter de la muerte, que es allí donde termina el dolor y empiezan los buenos recuerdos. Que no es el final de la vida, sino el final del dolor”.
- “Porque el hombre (y la mujer) son como las flores del valle, que hoy se abren y mañana son echadas al fuego: la vida del hombre es solo una estación, que llega y pasa”.
- “Pero el tiempo pasa, encargándose de soldar entre sí los distintos estados de ánimo como una especie de arco iris. La pena aguda va haciéndose más roma, se convierte en añoranza y la añoranza, en recuerdo…”.
- “El fondo del corazón del hombre es árido, Louis, como el suelo de ese viejo cementerio micmac de ahí arriba. Es casi roca viva. El hombre cultiva lo que puede…, y lo cuida”.
Con información de Lecturalia / Frases Libros / Ciudad Seva
--
--