El sexo en la época romana ha sido calificado como liberal y muchas veces perverso, aquí te presentamos diez prácticas de la antigua Roma para que tú mismo las juzgues.
Crear un burdel imperial
Calígula era un derrochador impenitente. Sus despilfarros llevaron a Roma a una profunda crisis económica y para intentar revertirla inventó toda clase de impuestos. Una de sus ideas recaudatorias más inverosímiles fue convertir su palacio en un inmenso burdel en el que ejercían, entre otras, algunas de sus hermanas y las mujeres de ciertos senadores. Así es, no sólo fornicaba con su hermana sino que le conseguía clientes.
Pececillos
El emperador Tiberio no sólo organizaba orgías con adolescentes, sino que creó una práctica para sus ratos libres. Según Suetonio, “había adiestrado a niños de tierna edad, a los que llamaba pececillos, a que jugasen entre sus piernas en el baño, excitándole con la lengua y los dientes”.
Casarse con una sobrina
Los gustos sexuales del Emperador Claudio fueron extrañamente «correctos» para la alta nobleza de la época. Fue de los pocos que no mantuvo relaciones homosexuales ni tuvo tendencias pederastas. Aún así, según el relato de Suetonio, cometió incesto al casarse con Agripina, hija de su hermano Julio César Germánico.
Expertos en sexo anal
Tiberio durante su retiro en Capri contrataba a jóvenes de ambos sexos a los que nombraba “expertos en coitos desviados” y les obligaba a copular en filas de tres mientras él observaba. Todos los pagos a los participantes se anotaban a la cuenta del Imperio.
El juego animal
Nerón, cansado de mancillar todas las partes de su cuerpo, ideó una nueva forma de juego. Vestido con la piel de un animal salvaje se lanzaba desde una jaula sobre las partes nobles de hombres y mujeres atados a un poste. Un vez satisfechos sus deseos, se entregaba a su esclavo Doriforo, a quien servía de mujer.
Prostitución a medio tiempo
Heliogábalo fue un político que para contribuir a la economía del gobierno ejercía la prostitución en sus ratos libres, además le robó la idea del burdel en la corte a Calígula pero mostró muchas más dotes para las finanzas que su ancestro. Era homosexual y ejerció el oficio con tal dedicación que presumía ante sus compañeros de palacio de ser el que más dinero recaudaba.
Convertir a un hombre en tu mujer
Nerón se enamoró del joven Esporo y quiso casarse con él. El problema es que los matrimonios entre hombres estaban prohibidos en Roma. Su decisión fue radical. Anticipándose a las operaciones de cambio de sexo, ordenó castrar al joven. Cuando se recuperó de la intervención, le vistieron con ropas de su difunta esposa Popea Sabina y se celebró una boda por todo lo alto. Una vez casados, Nerón obligó a sus congéneres a que lo tratasen como la mujer del Emperador.
Sexo con la propia madre
La madre de Nerón le instruía a menudo en los placeres carnales ante la preocupación de los ciudadanos romanos, que temían que Agripina obtuviera un exceso de poder a raíz de tan enfermiza relación. Pero, Nerón acabó ordenando el asesinato de su progenitora.
Paradas sexuales
Con tal de amenizar sus viajes, Nerón tuvo la idea de aderezar sus travesías por el río Tíber con una legión de prostitutas. La mecánica consistía en plantar cabinas cada ciertos kilómetros en las que prostitutas ejercían el papel de posaderas que le ofrecían hospitalidad desde la orilla.
Sexo con una hermana
Según Suetonio, Calígula “practicaba el incesto con todas sus hermanas y las hacía sentar consigo a la mesa en el mismo lecho, mientras su esposa ocupaba otro». Su favorita era Drusila. Habían mantenido su primera relación siendo unos niños y, ya de mayores, se la arrebató a su marido para seguir disfrutándola.
Con información de Playbuzz
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