La piel del rostro es la más delicada de todo el cuerpo humano y, también donde aparecen los primeros signos de envejecimiento, de ahí la importancia de cuidarla, especialmente a medida que vamos cumpliendo años para retrasar el envejecimiento prematuro y poder mantenerla joven y saludable durante el mayor tiempo posible.
Mantener una rutina de cuidado facial en la que utilicemos productos cosméticos con propiedades antiedad es fundamental, pero, en ocasiones puede no ser suficiente, siendo necesario recurrir a tratamientos de medicina estética como la radiofrecuencia facial, que se ensalza como uno de los tratamientos más eficaces para retrasar el envejecimiento de la piel
Si notas que últimamente tu piel ha perdido elasticidad y han hecho signo de aparición las primeras arrugas, toma nota porque en este post te vamos a contar qué es la radiofrecuencia facial y qué beneficios proporcionará a tu rostro. Será tu mejor aliada para lucir una piel radiante.
¿Qué es la radiofrecuencia facial?
La radiofrecuencia facial es una técnica de medicina no invasiva cuyo principal objetivo es estimular la producción de colágeno, lo que permite mantener la elasticidad de la piel, consiguiendo unos resultados similares a los del lifting, pero sin necesidad de cirugía.
Para ello, se aplican una serie de ondas electromagnéticas que penetran en las capas más profundas de la dermis, aumentando significativamente tanto la temperatura de la piel como los niveles de colágeno, lo que proporciona una mayor tensión a la zona tratada.
Este aumento de la temperatura provoca que las fibras de colágeno se contraigan y se reorganicen, estimulando así la producción de nuevo colágeno y elastina.
Este tratamiento es especialmente eficaz en zonas como la frente, debajo de los ojos, las mejillas, la línea de la mandíbula y el cuello, consiguiendo reducir la flacidez y proporcionando un rejuvenecimiento inmediato, a lo que hay que sumar que mejora la circulación de la piel y favorece la eliminación de toxinas.
¿Funciona la radiofrecuencia facial?
Aunque todo dependerá del estado que presente el estado de la piel del paciente, por lo general, los resultados de la radiofrecuencia facial son claramente visibles desde el primer mes, aunque cuando realmente los resultados son más significativos es a partir del cuarto mes, ya que es el tiempo necesario para que los fibroblastos puedan producir colágeno nuevo.
Los resultados de la radiofrecuencia facial tienen una duración de entre 8 meses y un año aproximadamente y, a partir de ese momento, lo ideal sería realizar otra sesión para mantener la piel joven, evitando que las arrugas y líneas de expresión hagan su aparición.
Principales beneficios de la radiofrecuencia facial
Previene y combate el envejecimiento de la piel
Sin duda, la principal ventaja de la radiofrecuencia facial es que es un tratamiento muy eficaz tanto para prevenir como para combatir el envejecimiento de la piel, consiguiendo mejorar el aspecto del rostro, que lucirá una apariencia mucho más joven, firme y saludable, al mismo tiempo que tratará la grasa que favorece el acné.
Al estimular la producción de colágeno y elastina, previene y reduce la apariencia de arrugas y líneas de expresión, especialmente en la zona de alrededor de la boca y de los ojos, aumentando la elasticidad de la piel, que se verá más firme y será menos propensa a la flacidez.
Así mismo, también reduce las manchas oscuras y las cicatrices del acné, mejorando la textura y apariencia de la piel significativamente.
No invasiva e indolora
Otra ventaja muy a tener en cuenta de este tratamiento es que se trata de una técnica no invasiva, lo que significa que puede aplicarse sin cirugía, y totalmente indolora. De hecho, no solo es que no duela, sino que la radiofrecuencia facial, a través del aumento de la temperatura y los movimientos que se realizan, tiene un efecto calmante y relajante para la piel, lo que hace que resulte muy placentero.
A esto hay que sumarle que este tratamiento no requiere tiempo de recuperación, por lo que podrás hacer vida totalmente normal en cuanto salgas de la clínica.
Apto en cualquier momento del año
A diferencia de otros tratamientos que no pueden realizarse durante el verano, como el peeling, la radiofrecuencia facial puede aplicarse en cualquier momento del año, incluso en aquellos meses en los que las temperaturas son muy elevadas, puesto que no es una técnica fotosensibilizante.
Podrás hacerlo cuando desees sin ningún riesgo, aunque sí será necesario proteger tu rostro de los rayos del solaplicando un protector solar con un alto nivel de protección.
Resultados duraderos
Es un tratamiento facial más duradero que otros, siempre y cuando se complete el número de sesiones recomendado, y se sigan todos los cuidados necesarios para proteger la piel.
Ya lo sabes, si quieres combatir los signos del envejecimiento en tu rostro, y buscas un tratamiento eficaz, que puedas aplicar sin necesidad de cirugía, ¡prueba la radiofrecuencia facial!
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