Por Aglaia Berlutti | El premio Oscar de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas del año 2023, es quizás uno de los más atípicos de la década. También, el que acumula opiniones más divisorias, complejas y duras. ¿Quién ganará y quién debería ganar en una ceremonia que, probablemente, pasará a la historia?
Con 11 categorías, ‘Todo a la vez en todas partes’ (2022) de los Daniels, logró lo que no consiguió ‘Arrival’ en el 2016. Convertirse en una multinominada a pesar de pertenecer al amplio y rico género de ciencia ficción. Se trata de una excepción histórica: la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas, rara vez presta atención a géneros más allá del drama. Pero la película protagonizada por Michelle Yeoh sorprendió a críticos y públicos, por combinar el popular concepto del multiverso con la historia emotiva de una heroína de edad madura. ¿El resultado? Un rico argumento étnico, sensible y bien construido, que además, tiene todo tipo de matices para el disfrute de un público más joven del que suele interesar a los gremios votantes de Hollywood.
La maniobra es obvia. El Oscar se hace cada vez más viejo — o mejor dicho, su audiencia envejece con rapidez y no logra captar al público más joven — por lo que, probablemente, llevar al podio a una cinta como la de los Daniels, sea un intento de aproximarse a nuevos terrenos. También, de evitar los habituales comentarios sobre sesgo, racismo y exclusión, que durante el último lustro se volvieron un férreo enemigo del Oscar. ‘Todo a la vez en todas partes’, hace honor a su título: es cada cosa que la Academia necesita, reunida en un mismo espacio y bajo un único argumento.
Ahora, ¿por ese motivo debería ganar? Méritos no le faltan al largometraje, pero la competencia en el cuadro de Mejor película, es tan poderoso como para que la pregunta sea inevitable. Lo mismo ocurre con el resto de las categorías centrales de la noche. De la reivindicación de Brendan Fraser a la glorificación de Michelle Yeoh. El Oscar 2023 parece tener mucho que decir y armas para hacerlo. ¿Pero es justo eso? Te dejamos nuestro análisis.
Y la mejor película… ¿Debe ser multiversal?
A pesar de sus considerables virtudes como relato, ‘Todo a la vez en todas partes’, compite con una colección de películas especialmente complejas y poderosas. De TÁR de Todd Field, en que el talento se entrecruza con la incorrección política, al negrísimo humor del ‘Triángulo de la tristeza’ de Ruben Östlund. El cuadro de mejores films del año abarca el debate sobre si las personas malas pueden hacer arte extraordinario (como la Lidya Tár de Cate Blanchett) hasta el dolor político de ‘Los espíritus de la isla’ de Martin McDonagh. Incluso el amor y la veneración al cine, en el biopic amable y levemente descafeinado ‘The Fabelmans’ en el que Steven Spielberg conmueve con sus mejores armas y cierta cursilería generosa.
De modo que la gran pregunta es que tanto necesita la obra de los Daniels para vencer. ¿Solo ser un manifiesto multicultural sobre el amor familiar y un homenaje a la ciencia ficción en clave de aventura espiritual? No parecen suficientes razones, para derrotar a ‘Ellas hablan’ (ignorada en todas las categorías de interés) y la frenética ‘Elvis’, esencia de la cultura pop llevada a lo estrafalario. Mucho menos a la poderosa ‘Sin novedad en el frente’ de Edward Berger, con toda su carga simbólica y un puñado de escenas formidables para la historia del cine. Pero probablemente lo hará, porque la Academia necesita (más que nunca), abrir sus limitados espacios hacia otros lugares, explorar la conexión temporal con un sentido étnico y dejar claro, que de ahora en más, los géneros no tradicionales entre la crítica más añeja y reaccionaría, tendrán un lugar.
¿Veredicto?
Probablemente ganará: ‘Todo a la vez en todas partes’
La que debería ganar: ‘Sin novedad en el frente’
La que ganaría si el mundo fuera justo: ‘TÁR’
Las grandes redenciones le gustan a Hollywood
El rubro de mejor actor, parece tener un ganador obvio. Brendan Fraser mostró toda su capacidad histriónica en un papel a la medida que hizo llorar a multitudes de fanáticos, asombrados porque el olvidado ídolo de los noventa tuviera algo que mostrar aún. Pero ¿es suficiente para triunfar? Sin duda, su encarnación de un profesor de literatura que lucha contra la obesidad mórbida, es impecable. También, el tipo de actuación que conmueve a la meca del cine. Con transformación física de por medio, Fraser superó años de olvido y volvió a convertirse en una destacada figura. Pero ¿eso es todo lo que necesita para ganar el Oscar?
Sí y no. Austin Butler creó un vívido retrato de Elvis Presley, que aunque resulta incompleto, tiene una potencia desgarradora. Por otro lado, Colin Farrell le dio vida a un Padraic y narró a la Irlanda dividida de 1920 a través de una actuación memorable. Por si eso no fuera suficiente, Bill Nighy le brindó un sentido irónico a la muerte en ‘Living’ y Paul Mescal, materializó la dinámica del recuerdo en ‘Aftersun’.
Pero la redención de Fraser es tan llamativa, como opacar sutilezas como el estudio sobre la depresión de un personaje, de la agonía de la vejez de un enfermo terminal o incluso, la mirada sobre nuestra cultura y sus cambios. Así que lo más probable, es que veamos al actor levantando la estatuilla el domingo.
¿Veredicto?
Probablemente ganará: Brendan Fraser
El que debería ganar: Billy Nighy
La que ganaría si el mundo fuera justo: Paul Mescal
Doble o nada, apuesta alta
En la categoría de Mejor actor de reparto, de nuevo ocurre el inevitable efecto de las 11 nominaciones ‘Todo a la vez en todas partes’, aunado a otra resurrección milagrosa del olvido colectivo. Jonathan Ke Quan, el recordado ‘Tapón’ de Indiana Jones, fue sistemáticamente rechazado y menospreciado por el gremio de actores, hasta ahora. Lo que hace su vuelta al cine de altos vuelos, más milagroso todavía. Con casi 30 años como doble de acción, sin acreditación en la mayoría de las películas en que participó, ahora lleva entre los brazos el SAG, el Globo de Oro y al menos diez premios más. Lo que le hace la opción casi segura para el Oscar en su apartado.
Pero compite con dos figuras de asombroso talento, que merecían una segunda mirada. Por un lado, se encuentra Barry Keoghan, que sorprendió a audiencia y crítica por su participación en ‘Espíritus de la isla’. Por el otro, el gran Brian Tyree Henry, por ‘Causeway’, una de las grandes olvidadas de los premios de este año. Ambos, lograron personajes multidimensionales y ricos en matices, que sostuvieron argumentos narrados con elegancia. Y en cualquier otro año, habrían obtenido una mayor repercusión en sus posibilidades para el Oscar. Lo mismo va para el encantador Judd Hirsch, con su maravilloso cameo en ‘The Fabelmans’
¿Veredicto?
Probablemente ganará: Jonathan Ke Quan
El que debería ganar: Barry Keoghan
El que ganaría si el mundo fuera justo: Brian Tyree Henry
La noche de los equívocos en el Oscar
El rubro de Mejor actriz, este año atravesó una serie de pequeños escándalos que hacen que sea una de las nominaciones más esperadas. En primer lugar, está el escándalo que rodea a la intérprete Andrea Riseborough por ‘Por To Leslie’. ¿El motivo? Llevarse por delante todas las reglas de postulación e imponer una estrategia frontal — que se resume a una campaña privada y personal con cada miembro del gremio de votantes — para lograr ser considerada entre los grandes nombres de la noche. Todo un logro para una película de apenas 27 mil dólares y que recaudó menos de diez en taquilla.
Al otro lado, está el enfrentamiento en redes entre Cate Blanchett y Michelle Yeoh. O mejor dicho, el gazapo en apariencia accidental del encargado de la imagen de la segunda, al publicar un artículo en Vogue en que se cuestionaba la nominación de Blanchett y lo innecesario que resultaba para su carrera, un tercer Oscar. El contenido fue borrado y las votaciones estaban cerradas para entonces, pero resultó un comportamiento considerado execrable y ciertamente, poco sofisticado.
No obstante, es evidente que eso no influye en las posibilidades de éxito de Yeoh, como no, gracias a la ola de ‘Todo a la vez en todas partes’. La actriz se paseó por la temporada de premios con los brazos cargados de estatuillas. Salvo en el BAFTA, en la que Cate Blanchett se lo arrebató por su magnífica Lidyia Tár. Pero Yeoh contraatacó en el SAG y levantó el premio. ¿Conclusión? Cualquiera podría ganar.
Cualquiera, claro, más allá de la ignorada Ana de Armas por Blonde.
O la polémica, Andrea Riseborough, cuyo papel de una mujer que rehace su vida con esfuerzo, resulta conmovedor y profundamente humano. O quizás, de la discreta Michelle Williams, por ‘The Fabelmans’, que parece destinada a competir siempre en un año con otras nominadas polémicas o enfrentando situaciones que la superan.
¿Veredicto?
Probablemente ganará: Michelle Yeoh
La que debería ganar: Cate Blanchett
La que ganaría si el mundo fuera justo: Cate Blanchett
Una superheroína para cambiar la historia
Se trata de la categoría menos clara, aunque en realidad, es más que probable que Jamie Lee Curtis por ‘Todo a la vez en todas partes’, sea la gran triunfadora. Su actuación es impecable, extraña y poderosa, además de una rareza en medio de esa sucesión de escenas barrocas y extravagantes. Su némesis/villana, que va desde una mujer corriente a un monstruo regurgitador prácticamente en la misma escena, es sin duda la mejor de su carrera. Y también, llega en un buen momento, en medio de la discusión de los Nepo babies en un Hollywood cada vez más atento a debates sobre origen y privilegios.
No obstante, debe enfrentarse a una maravillosa Angela Bassett por ‘Black Panther: Wakanda Forever’, que podría romper el muro de cristal que rodea a las películas de Superhéroes en las premiaciones y obtener el galardón. Más lejos en las posibilidades, están Hong Chau por ‘La ballena (The Whale)’, a pesar de romper el corazón de más de un espectador, y Kerry Condon por ‘Los espíritus de la isla’, no obstante de sorprender con una actuación vívida y original que sacude el sombrío argumento en cada aparición. En cuanto a Stephanie Hsu por ‘Todo a la vez en todas partes’, ha tenido un discreto paso por la alfombra roja, por lo que sus probabilidades de triunfo son escasas.
¿Veredicto?
Probablemente ganará: Jamie Lee Curtis
La que debería ganar: Hong Chau
La que ganaría si el mundo fuera justo: Kerry Condon
Un grande se enfrenta a… Nadie, en realidad
Es más que obvio que la Academia lleva años deseando reivindicar a Steven Spielberg por sus largos años de olvido. Y siendo así, ¿Qué mejor que este en que llevó su vida al cine para homenajear al cine? Hay pocas posibilidades que Martin McDonagh, los Daniels o el gran Todd Field. Mucho menos Ruben Östlund por ‘El triángulo de la tristeza’, a pesar de haber logrado la proeza de burlarse de prácticamente cada hombre, mujer y niño del mundo contemporáneo en una única película. Pero, la Academia desea honrar a uno de sus hijos predilectos. Y probablemente no haya nadie que la detenga en el empeño.
¿Veredicto?
Probablemente ganará: Steven Spielberg
La que debería ganar: Ruben Östlund
La que ganaría si el mundo fuera justo: Todd Field
Imagen portada: Shutterstock
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