Alfred Hitchcock ha sido la mente creativa detrás de muchos clásicos de suspenso desde la década de los 20. ‘Vértigo’ (1958) es una de esas películas que ha trascendido a través del tiempo, convirtiéndose en una imagen referencial para los que empiezan a explorar el séptimo arte.
CULTURIZANDO EN WHASTAPP
Este thriller psicológico cuenta la historia de un detective con acrofobia (miedo a las alturas) y vértigo, quien es contratado por un viejo amigo para vigilar a su esposa, bajo la sospecha de que ella está siendo poseída por un espíritu.
Para inmortalizar este proyecto, Hitchcock se aseguró de plasmar la intensidad de esta persecución mental en un póster icónico. Eligió entonces al diseñador gráfico estadounidense, Saul Bass, colaborador de los directores Billy Wilder, Stanley Kubrick y Martin Scorsese.
El estilo de Bass es minimalista y sofisticado, revolucionó completamente la manera de presentar los créditos antes considerados irrelevantes. Este diseñador los hacía visibles al espectador desde el póster hasta en la pantalla con su propia fuente “kinetic type”.
Este film gustó tanto a Hitchcock que el director compró los derechos de la película después de su estreno, junto a otras cuatro cintas que hizo en la época, para dejárselas como legado a su hija Patricia. Cerca de 1984 las películas fueron reestrenadas en varios países del mundo.
Carmen Véliz / culturizando.com
Con información de: IMDB / Blog de cine / 99Designs
--
--
Autor:
Daniela - culturizando.com
