La lucha libre es una parte fundamental de la cultura mexicana. Es un deporte que ha despertado pasiones a lo largo de los años, que se vive con una gran emoción, incluso con el paso de las generaciones.
CULTURIZANDO EN WHASTAPP
Hoy en día, se ha vuelto un fenómeno global, en parte debido a que es mucho más fácil de acceder y mirar, ya sea en la televisión o internet. La WWE ha transformado al wrestling en uno de los espectáculos más grandes, con Wrestlemania como el evento más importante del año.
Tanto en la WWE, como en otras compañías, como AEW o WCW en su momento, los luchadores mexicanos tuvieron, tienen y tendrán su lugar. Para muchos, es la gran aspiración, de llegar a las “grandes ligas” y lograr un mayor renombre, ser famosos de manera global y también de conseguir grandes salarios.
Nombres como Eddie Guerrero, Rey Misterio, Tito Santana, Mil Mascaras o El Santo son leyendas. Otros luchadores, más recientes, como Alberto Del Rio, Sin Cara, Kalisto, Andrade El Idolo, Humberto Carillo y muchos más, han tenido su lugar.
Volviendo a México, la lucha libre continúa despertando pasiones, y hay una motivación que continúa inspirando a más personas a perseguir sus sueños de convertirse en un luchador.
El estilo se caracteriza por la agilidad y los movimientos llamativos, como el famoso 619 de Rey Misterio. Se destacan por su movilidad y atletismo, y no tanto por su gran tamaño o musculatura. Esto no significa que no tengan fuerza, pero son más pequeños en comparación con luchadores del estilo norteamericano.
Otro componente fundamental de los luchadores mexicanos es su identidad. La gran mayoría no muestra su cara, sino que utiliza una máscara que los identifica. Este elemento ha sido parte principal de muchas rivalidades a lo largo de la historia.
Uno de los condimentos más atractivos de las luchas en México era la apuesta de máscara contra máscara. Esto significa que el perdedor del duelo debe abandonar su máscara y mostrar su verdadera identidad.
Esto hacía que las luchas tomaran una dimensión mucho más importante, pues ambos luchadores tenían mucho en riesgo, y el perdedor se daría a conocer por primera vez ante el público.
A continuación, haremos un repaso de las peleas más icónicas de la historia.
Las principales peleas en la historia mexicana
La organización principal de México se conoce como Consejo Mundial de Lucha Libre, o CMLL. Fue fundada en 1933 por Salvador Lutteroth, por lo que tiene ya 90 años en actividad.
A lo largo de su existencia, ha cambiado de nombre en un par de ocasiones, y también ha tenido alianzas con otras organizaciones globales, como Ring Of Honor, NWA o NJPW.
Cien Caras Vs. Rayo Jalisco Jr.
Una de las luchas más importantes de la historia se dio en 1990, durante el Aniversario 57. Allí se enfrentaron Cien Caras contra Rayo Jalisco JR., en un combate que tenía la máscara como apuesta.
El duelo no perdió tiempo, pues comenzó incluso antes de que suene el ring. Cien Caras sorprendió a su rival, y le propinó un golpe con una guitarra. Sin embargo, tras una lucha emocionante, fue el Rayo Jalisco quien se quedó con la victoria, gracias a un paquetito.
Finalmente, Cien Caras tuvo que entregar su capucha y mostrar su identidad: Carmelo Reyes. Con el correr del tiempo Reyes logró ser un personaje muy querido, a pesar de la pérdida de su máscara.
Místico Vs. Black Warrior
En el 73 aniversario, del año 2006, hubo un combate entre Místico y Black Warrior. Los que antes eran grandes amigos, se vieron enfrentados en una rivalidad. Ante la frustración por la popularidad de su amigo, Black Warrior traiciona a Místico y le hace la vida imposible, hasta llegar al combate.
Fue un duelo con todos los condimentos, donde ambos peleadores dejaron el 100%. Sin embargo, fue Místico quien consiguió la victoria, y obligó a Black Warrior a mostrar su identidad debajo de la máscara. Su nombre era Jesús Toral López.
Santo Vs. Gladiador
El combate entre Santo y Gladiador, del Aniversario 23, es recordado por muchos por ser la primera lucha que tuvo apuesta de máscara en la Arena México renovada.
Fue en el año 1956, y sirvió para que el “enmascarado de Plata” marcará su nombre en la historia tras vencer a Gladiador. Fue la primera de muchos combates de apuestas que seguirán con el correr de los años.
Atlantis Vs. Ultimo Guerrero
Iremos hasta el 2014, más precisamente al aniversario 81. Dos luchadores que supieron ser amigos y compañeros, incluso formando un equipo llamado los Guerreros de la Atlántida, habían llegado a su fin. Atlantis y Ultimo Guerrero iniciaron una rivalidad, que terminaría con la máscara de uno de ellos.
El día del combate, el público estaba dividido a la mitad, con apoyo igualitario a ambos peleadores. La emoción estuvo a flor de piel durante toda la lucha, que llegó a su final cuando Atlantis pudo acertar su golpe final, llamado Atlántida.
Último Guerrero aceptó la derrota, y le mostró a todos los mexicanos su nombre verdadero: José Gutiérrez Hernández.
Princesa Sugehit Vs. Zeuxis
Por último, hay que hacer una mención especial a un combate de mujeres, pues las amazonas también tienen su participación en el ring. En el 84 aniversario, Princesa Sugehit se enfrentó a Zeuxis, con apuesta de máscara de por medio.
Dejando todo en el combate, ambas luchadoras hicieron estremecer y gozar al público. Zeuxis se quedó con la victoria, y la Princesa mencionó con mucho orgullo su nombre por primera vez: Ernestina Salazar Martínez.
Estas luchas legendarias no solo dejaron su marca en la historia de la lucha libre, sino que también fueron de gran influencia para los espectadores que participan de las apuestas en base a los combates.
Por ejemplo, sentaron de base para utilizar herramientas de apuestas, como el caso de las estadísticas. Gracias a los datos, podían entender de mejor manera el historial de los luchadores, cual es su récord y las posibilidades de ganar que tenía cada competidor.
--
--
Autor:
culturizando.com
