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La ventana de Johari, una herramienta práctica para el autoconocimiento

La ventana de Johari, una herramienta práctica para el autoconocimiento

Por Daniel Colombo| ¿Estás percibiendo que tu auto imagen no coincide con la que los demás tienen de ti? ¿Has detectado brechas y grandes diferencias entre cómo eres y cómo lo manifiestas? Este artículo es para ti, ya que te explica paso a paso en qué consiste la ventana de Johari, una herramienta práctica para el auto conocimiento y desarrollo personal y profesional.

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La Ventana de Johari proviene de la psicología cognitiva, y fue creada por los psicólogos Joseph Luft y Harrington Ingham. Si observas bien las primeras letras sus nombres conforman la palabra Johari.

Está diseñada para reflejar e ilustrar los procesos de interacción humana y sus dinámicas. Este modelo es utilizado generalmente en grupos de auto ayuda y en ejercicios de dinámicas grupales en empresas y otras organizaciones, y permite, entre otros aspectos, mejorar la comunicación, promover el conocimiento acerca de uno mismo, generar sinergias, mejorar el desempeño y detectar oportunidades de mejora.

Cómo funciona

Ventana de Johari

La Ventana de Johari propone trabajar sobre cuatro cuadrantes o áreas: pública, ciega, oculta y desconocida, como una forma de graficar el espacio interpersonal donde interactuamos con los demás.

Al observarlo podrás distinguir dos enfoques distintos: el “yo” (tu propia visión) y los “otros” (la dimensión de los demás)

Repasemos cada espacio:

  • Área Pública:  Este cuadrante representa todo lo conocido por uno mismo y por los demás; incluso lo que muestras a los demás, lo que comunicas en forma de experiencias, comportamientos, carácter, estilo personal, ideas, posturas, emociones, pensamientos.
  • Área Ciega: Incluye lo que desconoces acerca de ti, aunque sí conocen los demás: por ejemplo, cuando algún acontecimiento nos refleja un aspecto nuestro sobre el que no tenías noción, a través de los comentarios de los demás o lo que dicen de ti. Suele suceder que internamente filtramos algunas cosas, sobre todo aquellas que consideramos poco favorables. Si varias personas dignas de confianza observan lo mismo, posiblemente haya algo de verdad en ello y quieras mirarlo en detalle.
  • Área Oculta: Aquí incluye todo lo que conoces de ti, pero que desconocen los otros: por ejemplo, pensamientos ocultos que no expresas, rasgos oscuros de tu personalidad, emociones que censuras y cualquier aspecto que no muestras abiertamente en forma pública, aunque también nos definen aunque vayan por dentro y no se expresen hacia afuera.
  • Área Desconocida: Es el área de todo lo que ignoro acerca de mi, y que tampoco conocen los demás. En este espacio hay un enorme potencial, porque se trata de un área virgen, por descubrir. Lo puedes lograr mediante el auto conocimiento, el tomar riesgos, y la consciencia del aprendizaje permanente en el proceso de avanzar. Por ejemplo, cuando eliges salir de la zona de confort, el espacio habitual conocido por ti, exploras tu área desconocida, con nuevas habilidades y talentos para entrar en la zona de expansión hacia lo nuevo.

Dos formas de aplicar la Ventana de Johari en tu vida

Ejercicio 1: 

Haz una lista de 5 a 10 características o rasgos que consideras que te definen como ser humano. Pide a algunas personas de confianza, como amigos, familia, compañeros del trabajo, que también preparen una lista similar acerca de ti, sin influenciarlos ni guiarlos. Una vez que tengas las dos listas, toma el gráfico de la Ventana de Johari y clasifícalos:  a) Rasgos públicos: los identificados por nosotros y los demás y que coinciden en las listas. b) Rasgos ciegos: los que escribieron los demás, y nosotros no.  c) Rasgos ocultos: los que mencionamos nosotros, pero no los demás. d) Todos los demás rasgos que no entran en las categorías anteriores los dejaremos en el área desconocida; por algo no pudieron ser identificados por ambas partes (tú y los demás).

Ejercicio 2: 

  • Paso 1 – Elabora una lista con 30 o más adjetivos calificativos que, según tú, describen tu personalidad, variados y hasta opuestos (por ejemplo: alegre, melancólico, emocional, racional, extrovertido, agresivo, cobarde, tímido, frío, sensible).
  • Paso 2 – Elige los 10 adjetivos que tú consideras que te definen mejor.
  • Paso 3 – Comparte la lista de los 10 adjetivos con personas que te conozcan bastante bien y que indiquen, desde su perspectiva, cuáles de esos adjetivos coinciden contigo. Pídeles que sean honestos y sinceros.
  • Paso 4 – Haz el diagrama de Johari, colocando en el área pública los adjetivos que coincidan tanto identificados por ti y por los demás. En la ciega, los adjetivos que los otros escribieron y que tú no. En ocultos, los que tú anotaste y no los demás. Y el resto, en el área desconocida.

El objetivo es que analizando esta representación te animes a descubrir rasgos que no conocías hasta ahora.

Si deseas afrontar tus zonas a trabajar, puedes reforzar la lista del área ciega con adjetivos de tipo “negativos” acerca de ti; éstos suelen ser o los más frecuentes que una persona identifica si tiene autoestima baja y poca consideración de sí mismo; o bien, le cuesta identificarlos por temor al rechazo o a seguir descubriendo aspectos aún no elaborados internamente. Sin embargo, si atraviesas esos sesgos cognitivos, es posible profundizar aún más en tus zonas oscuras, para conocerte mejor.

Foto: Shutterstock

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