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Frank Abagnale: de delincuente a asesor de seguridad del FBI

Frank Abagnale: de delincuente a asesor de seguridad del FBI

Por Cosas Muy Importantes | Frank Abagnale Jr. fue un hombre que saltó a la fama por haber sido uno de los delincuentes más grandes de la historia. Curiosamente fue de estafador a héroe en muy poco tiempo, con un raid delictivo que en cinco años llegó a tener hasta ocho identidades distintas, con las que pasó de ser pediatra hasta abogado y piloto de avión.

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Sus acciones fueron tales que la historia de Frank Abagnale Jr. fue la que inspiró la película Atrápame si puedes, protagonizada por Leonardo DiCaprio,Tom Hanks y Christopher Walken, uno de los mejores films de Steven Spielberg. De hecho, está clasificada como su cuarta mejor película en Rotten Tomatoes.

En el film, la historia da vueltas en torno a un agente del FBI que asume como propia la misión de capturar al astuto estafador, Frank Abagnale, quien no solo se escapa, sino que se deleita con la persecución.

La historia de Frank Abagnale Jr.

Frank Abagnale Jr. nació un 27 de abril de 1948 en Bronxville, en el estado de Nueva York, en Estados Unidos. Su carrera delictiva comenzó cuando tenía apenas 15 años y vivía en Nueva York.

Uno de los fraudes que más sobresalen de Frank Abagnale tuvo lugar entre los años 1964 y 1966, cuando fingió ser piloto de la aerolínea ya desaparecida Pan American World Airways –Pan Am– y así poder viajar por el mundo sin pagar un sólo boleto aéreo.

Para entender cómo llegó a idear este plan, hay que volver un poco atrás en su historia. Cuando Frank Abagnale era adolescente tuvo una inclinación a cometer delitos de diversos tipos, falsificó su licencia de conducir para hacerse 10 años mayor, y también diferentes documentos para inflar su currículum educacional. Tras obtener ciertos trabajos con los que no estaba conforme, comenzó a emitir cheques sin fondos que cobraba a los bancos desde diferentes cuentas.

Para mejorar su sistema, Frank Abagnale decidió que debía personificar a alguien prestigioso y así impresionar a los empleados bancarios. Se decidió por piloto aéreo, con la imagen del estereotipo del impecable uniforme y los aires de mundo.

Fue entonces cuando Frank Abagnale dijo que se llamaría Frank Taylor y sería piloto de Pan Am. Lo primero que hizo fue llamar a la compañía y solicitar un uniforme nuevo, ya que el suyo había sido extraviado en un vuelo. Luego aprendió todo lo que estaba a su alcance sobre aviación, haciéndose pasar por un alumno de secundario que estaba haciendo un informe sobre la aerolínea, pudo asistir a cursos especializados de la misma empresa a la cual estaba engañando doblemente.

Una vez que tuvo conocimientos básicos para hacer de cuenta que conocía sobre lo que estaba hablando, Frank Abagnale falsificó una identificación de piloto de Pan Am y su carnet de la F.A.A. (Federal Aviation Administration). Cuando terminó, aprovechó su nueva identidad para volar gratis en aviones de la compañía a lo largo y ancho del mundo. Se estima que voló más de 200 veces en calidad de piloto pasajero de la compañía aérea.

Otro cambio de identidad

Luego de dos años frenéticos alrededor del globo, Pan Am comenzó a sospechar de él y ante la más mínima señal de poder ser descubierto, Frank Abagnale decidió volver a cambiar de identidad. Supo ser un médico respetado del estado de Georgia, en esta ocasión su apellido era Conners, y luego cambió también su nombre de pila. Fran Abagnale también fue médico pediatra. lLego de obtener una identificación falsa y trabajó durante once meses en un hospital en Georgia, hasta que decidió abandonar esta práctica cuando puso en riesgo la vida de un bebé.

Robert Black, abogado, fue otra de las identidades que supo personificar. Graduado de la Universidad de Harvard con solo 19 años, ejerciendo la profesión durante varios meses.

Más tarde, Frank Abagnale se instaló en Montpellier, Francia, a buscar una vida un poco más tranquila y sin sobresaltos. Pero ya tenía una docena de países que querían atraparlo.

Frank William Abagnale, Jr. actualmente es director de Abagnale and Associates, compañía financiera de consultas de fraudes.

Fue ahí que fue descubierto por el FBI tras una denuncia de una ex pareja que lo reconoció en carteles de «se busca» de Interpol.

Reclamado por una docena de países en los que había cometido delitos, Frank Abagnale estuvo preso temporalmente en Perpiñán (Francia); en Malmö (Suecia) y luego cinco años en los Estados Unidos, en la prisión federal de Petersburg (Virginia), condenado bajo los cargos de suplantación de identidad, fraude, falsificación de documentos, ejercicio ilegal de profesiones, robo de bancos y otros.

Reconociendo la enorme astucia que Abagnale tuvo para la falsificación desde sus muy tempranas edades, el gobierno estadounidense le ofreció salir de prisión a cambio de colaborar en la lucha contra el fraude. Ha escrito varios libros y se hizo millonario al instalar una consultora especializada en la detección de fraudes económicos. Además de esto, Frank ha sido el diseñador de muchos de los cheques antirrobo más seguros que se usan actualmente en todo el mundo.

¿Quieres concoer más sobre estos estafadores? Escúchalos en el episodio 62 de Podcast Cosas Muy Importantes, en tu plataforma de Podcast favorita y recuerda suscribirte a nuestro Patreon para tener acceso a contenido exclusivo.

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