Presentamos 6 aficiones, infantiles o románticas, que resultan difíciles de imaginar de parte de los líderes más crueles y sanguinarios en la historia.
Si bien es difícil asociar un gusto popular con los personajes históricos más malévolos, estos son humanos y naturalmente tienen alguna afición inocente. Aunque pueda resultar inaudito pensar que alguien como Hitler fue capaz de cantarle una canción de cuna a un niño, alguna pizca de bondad podemos hallar en las aficiones de los líderes más crueles.
Jomeini se recreaba escribiendo versos llenos de romance
El exayatolá iraní Jomeini, personaje autoritario y radical, en su juventud escribía poemas cursis: “Tu amor me ha convertido en un esclavo y débil ante al alcohol. Deseo una copa de vino de la mano de una enamorada. Me he quedado prendido de tu lunar sobre los labios. Tus rizos me han aturdido”.
Al Capone escribía canciones de amor para su esposa
El imponente jefe de la mafia, también conocido como Scarface, se distraía en sus ratos libres de torturas, balaceras y otras funciones requeridas en el negocio sucio, practicando la composición de melodías amorosas.
A Hitler le encantaba Blancanieves y los siete enanos
La gente suele conocer que Adolf Hitler aspiró a ser pintor pero fue rechazado. Lo que no es tan conocido es el que el Führer era fanático de las películas de Walt Disney. Consideraba a Blancanieves y los siete enanos como una de las mejores películas y guardaba una copia de este filme (junto a otros objetos asociados con Mickey Mouse). Incluso hizo bocetos de los siete enanos y Pinocho.
Stalin solía escribir comentarios en los lienzos de hombres desnudos
El dictador soviético solía coleccionar desnudos masculinos realizados por artistas rusos del siglo XIX en los que él escribía frases cínicas, mordaces y alusiones sexuales.
Cabe aclarar que, a pesar de este hecho, un estudio psicológico actual descartó que Stalin guardara en secreto tendencias homosexuales.
Sadam Husein se recreó escribiendo una novela romántica
Aunque hay personas que aseguran que Sadam contrató a un grupo de escribientes para la redacción de la novela, la publicación se encuentra bajo el seudónimo de S. Hussein.
La novela tiene por nombre Zabiba y el rey. Simboliza el amor de un gobernante por su nación, es decir, de Husein por Irak. En la novela esto está representado en el enamoramiento del rey por Zabiba.
Kim Jong-il amaba el básquetbol
El líder autoritario de gustos extravagantes Kim Jong-il era aficionado al básquetbol y admiraba profundamente a Michael Jordan, el ídolo del deporte en los años 90. Tanto así que coleccionó en presentación VHS todos los juegos en los que Jordan participó.
La Secretaria de Estado del Gobierno estadounidense Madeleine Albright cuando se reunió con el líder norcoreano en el año 2000 le obsequió un balón de básquetbol firmado por Jordan. Kim Jong-il ordenaría permanente la exposición del balón en el Museo del Entendimiento Internacional.
Con información de: Craked / Pijamasurf / La vanguardia.
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