Políglotas del Mundo

“Entender una lengua no es lo mismo que vivirla”. A los 55 años, Clarisa M. tiene dificultades para recordar su lengua madre. La australiana originaria de Chile, aún se encuentra con pequeñas vacilaciones a la hora de hablar con fluidez en su lengua madre. Treinta y cinco años fuera de su patria, le han obligado a “reaprender” parte del idioma español, el cual, según ella, únicamente existía “en lo profundo de su subconsciente”.

Sin embargo, los políglotas e hiperpolíglotas, gentes capaces de manejar múltiples idiomas, han sorprendido y aún sorprenden al resto del mundo con el manejo de 5, 10, o más lenguas. La revelación más reciente, y probablemente uno de los casos más sorprendentes del “fenómeno” de la hiperpoliglotía en la historia, lo representa el joven alemán Sebastian Heine, a quienes los medios han acertado en llamar “la torre de Babel humana”. Con tan solo 22 años, el estudiante de Filología Indogermánica es capaz de comunicarse en nada menos que 35 idiomas distintos, de los cuales él, prefiere el pastún, hablado por una minoría étnica de medio oriente.

Visto como un prodigio por muchos, Sebastian afirma que no es ningún genio, sino tan solo perseverante en el estudio de las lenguas. Desde los siete años se introdujo en el griego casi como un juego, y hasta el día de hoy no cesa de aprender nuevos idiomas. Su “modesta” meta es hacerse con el aprendizaje de dos idiomas nuevos cada año.

Menos ostentoso pero igualmente asombroso, es el caso de Jorge Fernández, el joven peruano de 18 años que habla y escribe fluidamente una docena de idiomas, entre los que se cuentan español, inglés, francés, alemán, sueco, rumano, italiano, portugués, holandés, catalán, gallego y mandarín.

Según Jorge, su obsesión por los idiomas comenzó cuando su madre lo castigó por culpa de sus malas notas en el colegio, privándolo del chat y teléfono personal. Un curso obligado de francés despertó curiosidad en él, a lo que continuó con el italiano y el rumano por cuenta propia. Los siguientes 9 idiomas no tardaron en llegar, y la ahora meta del joven peruano es llegar a dominar algún día 25 lenguas.

Pero ¿Cuál es el políglota más grande del mundo? ¿Cuántos idiomas es capaz de manejar? No son 40, y tampoco son 50; Ziad Youssef Fazah, el dueño de las múltiples lenguas, ostenta tener un concepto básico de al menos 60 idiomas distintos. Claro que, como mi amiga Clarisa diría “entender una lengua no es lo mismo que vivirla”. Y esto se evidencia en el caso de Ziad Fazah, quien ejercita regularmente solo un grupo reducido de tales lenguas, por lo que muchas tienden a escaparse de su memoria. Solo vale recordar un embarazoso episodio sufrido por el erudito en un conocido programa televisivo chileno, en el cual varios de los invitados extranjeros intentaban comunicarse con el hiperpolíglota en sus respectivas lenguas sin mucho resultado.

Gentes con historia

Sin embargo, los límites del ser humano pueden albergar sorpresas sin fin. Y en este caso, los límites conocidos lo suponen el cardenal Giuseppe Caspar Mezzofanti, y el político y lingüista Jhon Bowring. Del religioso, nacido el 17 de septiembre 1774, se asegura que era capaz de dominar con fluidez treinta y ocho idiomas, medio centenar de dialectos, y poseía nociones básicas de muchos idiomas más. Se estipula que, en total, conocía aproximadamente un centenar de distintas formas de comunicación. Del funcionario inglés (Bowring) puede decirse que fue el hombre más erudito en lenguas jamás conocido: llegó a conocer medianamente unos 200 idiomas y manejaba un centenar con seguridad. Nacido en 1972, se desempeñó como gobernador de Hong Kong, y además fue escritor y trotamundos. Recibió el título de Caballero de la Orden de Bath y fue miembro de la Royal Society y la Royal Geographical Society. Hasta el momento, no se conoce un mayor intérprete de lenguas que Bowring.

Entre otros de los grandes prodigios del idioma figura el lingüista Kenneth Locke Hale, quien tenía el don del aprendizaje rápido y preciso de lenguas extranjeras. Durante sus estudios de sintaxis y léxicos fue capaz de aprender idiomas aborígenes en peligro de extinción tales como el Hopi, el Navajo y el Warlpiri de Australia. En total, se estipula que llegó a manejar unas 50 lenguas distintas.

Por último también cabe nombrar a Georges Dumézil, un famoso historiador francés que dominaba una treintena de lenguas sin mayores sobresaltos.

Contemporáneos y afamados

Pero más allá de los “monstruos” de las lenguas citados, existen muchos políglotas en la historia que gozaron de gran fama. Entre ellos, se pueden nombrar a los dos Papas católicos más contemporáneos: Juan Pablo II, y Benedicto XVI. El primero, dominaba polaco, esperanto, griego clásico, latín, italiano, francés, español, portugués, inglés y alemán, tenía conocimientos de checo, lituano, ruso, húngaro, japonés, tagalo y algunas lenguas africanas; el segundo, posee un dominio fluido de por lo menos una decena de idiomas.

Escritores políglotas fueron James A. Aloysius Joyce, James Yoyce y J.R.R. Tolkien, conocedores los dos últimos de 13 lenguas.

Misma cantidad de idiomas maneja el arqueólogo Jean-Francois Champolion, quien logro descifrar el significado de los jeroglíficos, gracias a sus conocimientos de copto.

Entre los artistas con el “don” se destacan Laura Paussini (5 idiomas) y el actor y músico estadounidense Paul Robeson.

Para terminar, entre los deportistas interparlantes se encuentran los dos jugadores de baloncesto Arvidas Sabonis y Dikembe Mutombo, el primero de ellos con 5 lenguas, y el segundo con 9 (incluidas 5 africanas).

El mundo de las lenguas es fascinante y tentador. Aprender nuevos idiomas da estatus social, nos acerca más al resto del mundo y puede ayudar al cerebro a responder con mayor seguridad ante estímulos sensoriales aparentemente contradictorios. Pero si lo que usted intenta es establecer un nuevo record de idiomas… mejor que vaya abriendo los libros y procure coger una muy buena silla.

@Culturizando