El Gecko es un tipo de lagarto pequeño, y más de 1.500 subespecies diferentes pertenecen a esta categoría de lagarto. El aspecto del Gecko puede variar debido al hecho de que existen tantas especies diferentes. La mayoría de ellos tienen un color verde vibrante y un vientre crema. Tienen una cola larga y delgada. También cuentan con ojos grandes y abiertos.
Un gecko tiene un promedio de 15 cm de largo. El Gecko se encuentra en regiones cálidas de todo el mundo. Su población es alta y parecen hacerlo mejor en zonas donde la temperatura diaria varía de 78 a 88 grados Fahrenheit. No pueden sobrevivir en la noche si la temperatura desciende por debajo de los 70 grados Fahrenheit. Estos reptiles tienen costumbres nocturnas, se alimentan de insectos (grillos, mariposas, etc) y residen en los lugares lluviosos. Logra moverse entre los árboles con gran habilidad. No sólo es un experto imitador, si no que pude cambiar su cuerpo a voluntad, todo esto para espantar a sus depredadores.
El cuerpo puede tener áreas de diferentes colores que pueden incluir tonalidades de azul, naranja, rosa, amarillo y verde. Muchas especies de la Geckos poseen un tipo de habilidad que les permite cambiar de colores, sobre la base de su estado de ánimo y la temperatura a su alrededor.
El Gecko es la única especie de lagarto con cuerdas vocales, y puede hacer los sonidos. Hacen gran variedad de gorjeos, que utilizan para la comunicación. Algunos de los sonidos son para llamar a sus compañeros, para proteger su territorio, o para alertar peligros inminentes.
Aunque es un maestro del camuflaje y experto en salir airoso del peligro, su hábitat se ha visto amenazada, por la deforestación y el comercio de mascotas. Además, estudios científicos indican que estos animales sólo puede vivir en zonas específicas, si tienen un cambio de clima podrían morir.
Foto: Gecko / Shutterstock
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