El Camino de Santiago es una de las rutas que se realizan en España desde hace muchos años atrás, ya que su origen es medieval. Esta forma parte de una de las rutas de peregrinación cristiana que parte desde los Pirineos y tiene como destino la tumba de Santiago el Mayor, que se encuentra en la catedral de Santiago de Compostela en Galicia.
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Si deseas hacer este recorrido, hay una serie de cosas que debes tener en cuenta, por lo que te ofrecemos algunos consejos que te pueden ayudar en tu viaje:
Toma la decisión con certeza
Recuerda que se trata de una ruta que muchos peregrinos cristianos realizan para reafirmar su fe. La mayoría de las personas que eligen hacer este camino, tienen alguna razón para hacerlo o simplemente es algo que le da satisfacción a nivel espiritual.
Así que es importante calcular los días disponibles para hacerlo, informarse primero de como es el camino, y tener en cuenta todo lo que se necesita para partir. Incluso si deseas contratar a una agencia que tenga guías turísticos, para evitar perderse y tener cubiertas las comidas y todo lo que se necesita.
Hay personas que incluso realizan entrenamiento, para tener la resistencia suficiente. Llevan calzado cómodo, establecen horarios de descanso. Lo cierto es que debes dejar el miedo atrás y motivarte a caminar para hacer tu recorrido.
¿Ir solo o acompañado?
Si es tu primera vez realizando este camino, es mejor que vayas acompañado por una o más personas, a menos que te guste hacer este tipo de actividades individualmente. Aunque es un camino muy transitado, se dice que más de 300 mil personas lo recorren anualmente.
Muchas de las personas que han realizado este camino, aseguran que es uno de los más seguros, aunque es entendible que no todos se sientan cómodos en un lugar completamente desconocido para ellos.
¿Entrenar antes de hacer la ruta?
Aunque no necesitas ser un atleta profesional para hacer esta ruta, es recomendable que te prepares lo suficiente y ganes resistencia, ya que en el Camino de Santiago podrías durar todo el día caminando.
Prepárate caminando un par de horas al día, porque posiblemente en el viaje solo podrás hacer paradas cada hora u hora y media, para tomar descansos y disfrutar de la gastronomía que te vas a encontrar.
Acostumbra a tu cuerpo un par de meses antes, a caminar lo más que puedas diariamente. La idea es agarrar el ritmo, acostumbrarte también a llevar peso, ya que necesitas llevar tu mochila en los hombres mientras caminas.
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Lleva solo lo necesario
Primero que nada, es importante elegir una mochila adecuada, que tenga unas buenas correas de hombros acolchadas y ajustables, asegúrate que sean lo suficientemente cómodas para tu viaje.
Elige una mochila con cinturones ajustables, tanto para el pecho como para la cintura, ya que esto te ayudará a distribuir mejor el peso que llevas.
Lo más recomendable es que no lleves más de 8 kilos cargando, ya que esto te podría dificultar tu recorrido. Muchos dicen que lo mejor es llevar solo la mitad de lo que habías visualizado.
Puedes optar por un pantalón largo y uno corto, ropa interior y unas tres camisetas (una que sea solo para dormir y las otras para cambiarse durante el camino), lo mismo con los calcetines.
No olvides protección solar
Lleva tu bloqueador solar, también debes incluir gafas oscuras y gorras para protegerse de los rayos solares, porque pasarás al menos 8 o 10 horas al aire libre.
No te preocupes demasiado por lo que olvidaste, en el camino hay diferentes pueblos y comercios en los que puedes comprar productos útiles e incluso más ropa.
Hacer el camino de Santiago es una experiencia bonita, que puede traerte mucha paz, sobre todo si tienes creencias religiosas que se basan en el cristianismo o el catolicismo.
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Autor:
Daniel G.
